El Tribunal Supremo Electoral (TSE) planifica implementar el voto electrónico (conocido también como e-voto) para las elecciones generales del 2014, este nuevo sistema sería el siguiente desafío después del padrón biométrico, que tiene como fin profundizar la democracia participativa en el país, pero que implicará una “fuerte inversión” económica por parte del Estado.
La vocal del área de informática del TSE, Fanny Rivas, informó que en el presupuesto de la gestión 2012 se incluyó el monto que necesitará la implementación del e-voto en Bolivia, aunque no precisó la cifra exacta.
Dijo que un primer paso para la digitalización fue el registro en el padrón biométrico y lo que sigue es implementar el voto digital.
“Estamos tomando las previsiones de acercamiento con países que están bastante desarrollados (en el tema), uno de esos es Brasil”, indicó, al anticipar que este nuevo sistema de votación significará un cambio novedoso sobre todo de actualización.
“Significará una inversión fuerte, pero no podemos quedarnos obsoletos, tenemos que avanzar a tono de los otros países más desarrollados”, indicó Rivas.
La idea del voto electrónico, según el ex vocal de la ex Corte Nacional Electoral Jorge Lazarte no es nueva, dijo que ya en 1990 se pensó en implementar este sistema, pero la idea fue desechada por la cantidad de recursos económicos que implica.
Seguridad
Rivas dijo que la implementación de este nuevo sistema dará más seguridad a los votantes, al garantizar que el voto que emitirá inmediatamente será contabilizado y registrado. “Hay un margen de seguridad, el ciudadano sabrá que a través de su huella digital, de que su voto será respetado y es el que está saliendo en el momento en que se den los resultados”.
Este sistema de votación ha sido calificado como anticonstitucional en algunos países (como Alemania) por no permitir la fiscalización del proceso electoral por personas sin conocimientos altamente especializados.
Lazarte considera que es una medida necesaria, pero que debe aplicarse “poco a poco” tomando en cuenta todas las medidas de seguridad, por la susceptibilidad ante los riesgos de la manipulación electrónica y la credibilidad que deben tener de la ciudadanía las autoridades electorales.
“Hay que tener mucho cuidado porque la gente está acostumbrada a votar de una manera y cuando no ve su voto desconfía, porque el voto electrónico sólo se marca”, aseguró Lazarte.
Dijo que Bolivia es uno de los pocos países donde se “demora tanto” en dar a conocer los resultados oficiales de las elecciones.
Adelantos en Brasil
En Brasil los votantes usan en todas las elecciones máquinas de votar electrónicas que recogen y cuentan los votos en una sola máquina, como también sucede en gran escala en la India, Venezuela y los Estados Unidos. Un método para detectar cualquier error con las máquinas de votar es el de las comprobaciones paralelas, que se llevan a cabo el día de la elección con máquinas elegidas al azar. Lazarte coincide con la idea de hacer un plan piloto que consista votar en urna y al mismo tiempo electrónicamente, de manera que los resultados de uno y otro deben coincidir.
Un requisito fundamental para la implementación del nuevo sistema electoral- según Rivas- es que la Asamblea Legislativa modifique la Constitución Política del Estado (CPE). “También tendríamos que ver la modificación de la normativa electoral para tener un respaldo legal pleno”, indicó.
Experiencias
• La implementación en Brasil, Venezuela e India fue gradual.
• Brasil tardó 20 años en llegar a una universalización del voto electrónico, desde 1986, cuando reformó el sistema electoral, hasta las elecciones de 2006.
• Venezuela experimentó por primera vez la implementación del voto electrónico en 2004 de manera gradual. Argentina, Paraguay y este año Perú también innovan.
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