Los vecinos que piden el respeto a la democracia, armaron una barricada en el puente Cala Cala para defenderse de este grupo movilizado que se encuentra armado con palos y piedras.
En su recorrido desde la avenida Ayacucho no hubo presencia policial.
En el norte de la ciudad se observó la misma situación; sin embargo, minutos después, tras el reclamo de los vecinos de la avenida Libertador, un contingente de efectivos llegó al punto de conflicto.
Afortunadamente, la situación no derivó en un enfrentamiento y al promediar las 11:20 el grupo de transportistas se retiró.
El camarógrafo y productor audiovisual de Los Tiempos fue agredido por estas personas que además intentaron quitarle los equipos de trabajo. El grupo de ciudadanos que acatan el paro también afectó el trabajo periodístico.
Posteriormente en pleno Prado cochabambino se registraron hechos de vandalismo.
En Quillacollo, durante las primeras horas de la mañana, los transportistas marcharon rumbo a su cabildo en la plaza Bolívar.
En Cochabamba se prevé una concentración de ciudadanos que piden el respeto al voto, a las 18:00.
Ayer, seis sectores de la ciudad se convirtieron en campos de batalla que dejaron a ocho personas heridas, uno en estado muy grave y otro que perdió tres dedos de la mano y varios policontusos, además de unos 20 detenidos.
Hoy, el comandante departamental de la Policía, Raúl Grandy, nuevamente reunió a los efectivos en la plaza principal para patrullar distintas zonas. La institución es criticada por permitir que el vandalismo se apropie de las urbes.
Diferentes ciudades del país amanecen nuevamente con bloqueos por el paro indefinido y se prevé marchas y concentraciones durante esta jornada.
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