El diputado cruceño Richard Ribera aseguró que no recibió ninguna citación oficial tras conocer que existe una orden de aprehensión en su contra por el caso de la toma militar de la plaza Murillo, ocurrida el 26 de junio de 2024. Negó cualquier relación con el excomandante del Ejército, Juan José Zúñiga, y acusó al Gobierno de utilizar la justicia para montar un “show político” y amedrentar a la oposición.
“Si en vez de mandar una orden de aprehensión, que es ilegal, mandan una citación, yo me voy a presentar. Porque soy hombre de bien, siempre voy a obrar con la verdad”, declaró Ribera en entrevista con un medio televisivo. Aclaró que no se encuentra en la clandestinidad y que ejercerá su defensa en libertad.
La orden de aprehensión fue confirmada por el ministro de Justicia, César Siles, quien señaló que Ribera es el quinto implicado en el caso por el que ya fueron aprehendidos el abogado Jorge Valda, el general retirado Marco Bracamonte, el periodista jubilado Bismarck Imaña y el coronel Mario José Tanaka.
“Estoy seguro que el pueblo cree lo que decimos quienes hemos sido involucrados injustamente. Este gobierno ya no tiene credibilidad con nadie. Lo que buscan es acallar a quienes pensamos distinto”, afirmó Ribera.
El parlamentario aseguró que su inclusión en la lista de investigados responde a su rol como opositor. “Siempre he mantenido una línea de respeto a los derechos de las personas, a la libre expresión, al poder pensar diferente y creer en la democracia. Jamás Richard Ribera sería parte de este tipo de tramoyas llamadas golpe de Estado”, sostuvo.
Asimismo, calificó la acusación como una estrategia del Gobierno para distraer la atención de los problemas reales del país. “Esto es para desviar la mirada del pueblo, porque saben que están dejando a Bolivia sin dólares, con avasallamientos, injusticia y crisis”, añadió.
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