Presionada, agredida y cansada", así se encuentra Gabriela Zapata, la exnovia de Evo Morales. Ella se anotició de la revelación que realizó su tía, Pilar Guzmán, sobre el hijo que tuvo con el primer mandatario y que "está vivo". Ahora recibe amenazas de muerte.
"Ella está muy mal, está presionada, está agredida y está asumiendo un proceso que cobró una injustificada violencia en contra de ella. Recibió amenazas de muerte, contra su familia. Llegan por teléfono y le dicen que la van a degollar", explicó a EL DEBER uno de sus abogados, Wálter Zuleta.
"Sí, está vivo. Está aquí", dijo en las últimas horas la familiar de Zapata, en referencia al menor, que según la versión de Morales falleció en 2007 y que es pilar de la denuncia por tráfico de influencias, debido a que establece la relación entre el primer mandatario, la empresaria y esparce dudas sobre los contratos millonarios entre CAMC y el Estado.
El jurista explicó que dentro de las advertencias que llegan por teléfono a la expareja del presidente "le dicen que se calle la boca, que la van a degollar, que van a desaparecer ella y su familia". Evitó decir si esos mensajes llegan desde de Gobierno, aunque calificó de "político" el caso.
Zapata se enteró de las declaraciones de su tía. "Esos temas personales no tienen que ver con el proceso. En algún momento ella llamará a una conferencia de prensa para decir su verdad. Ella está muy cansada y demacrada, y tomó como un evento más de todo esto", reiteró Zuleta.
Mañana a las 15:00 en el juzgado cuarto de instrucción en lo penal será su audiencia de medidas cautelares. Zapata fue acusada por el delitos de enriquecimiento Ilícito y enriquecimiento ilícito de particulares con afectación al Estado.
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