El gobernador del departamento de Santa Cruz, Rubén Costas, en la sesión de honor realizada en la Casa de la Libertad en la ciudad de Sucre, manifestó su molestia y rechazo a las alusiones emitidas por el presidente Evo Morales, quien volvió a calificar de “separatistas” y “conspiradores” a las autoridades posesionadas de Beni, Tarija y Santa Cruz.
“Opté en un momento de levantarme porque no admito ni del Primer Mandatario ni de ningún ciudadano boliviano que se nos diga conspiradores, que se nos diga a los cruceños separatistas, ya mucho daño nos ha hecho a los cruceños ese adjetivo, porque somos fundadores de esta República y de esta Patria”, dijo Costas a los medios de comunicación a su salida del acto central.
Este hecho se sumó a otros que contrastaron la relevancia de este evento que da inicio a la era autonómica en el país, demostrando que los conflictos entre las autoridades centrales con las regionales aún están vigentes.
El Presidente del Estado comenzó su discurso haciendo un llamado a la unidad y el trabajo; sin embargo, luego atacó a los gobernadores de Tarija, Mario Cossío; de Beni, Ernesto Suárez; y del departamento de Santa Cruz, Rubén Costas, sindicando que ellos habían conspirado contra su mandato. Ante estas palabras Costas hizo un amague de retirarse de la sesión.
NUNCA MÁS
Posteriormente, en la toma del juramento los tres gobernadores de oposición se negaron a participar de un cóctel de honor, limitando su presencia a escuchar la lectura formal ante los símbolos del Estado Plurinacional.
“Cuando el Presidente pasó a felicitarme por este acto que considero administrativo, porque yo juré con los símbolos nacionales, jure ante la Biblia, ante mi credo, mi pueblo mandante y ante la Patria, entonces le dije al Presidente que no admitiría nunca más que se nos diga conspiradores o separatistas, porque si eso fuera cierto él ya tendría que haber cumplido y meternos presos”, indicó el gobernador de Santa Cruz.
REACCIÓN JUSTA
La analista política, Jimena Costa, en declaraciones a una red televisiva, sostuvo que “la reacción de Rubén Costas no es solamente de él, es el hecho de que se haya agredido al pueblo cruceño de calificarlos de separatistas, como terroristas posteriormente, y esta indignación la tiene que expresar el Gobernador”.
Con la posesión formal de los nueve gobernadores se inicia para el país una nueva era enmarcada en los parámetros de la autonomía en sus distintos niveles y en espera de la legislación que coordinará las facultades de las regiones respecto a la Constitución Política del Estado.
Rubén Costas afirmó que espera poder coordinar acciones con el Gobierno central, como un tema que queda pendiente a partir de esta jornada.
“Como lo dije el 4 de abril, estamos dispuestos a tender la mano para que trabajemos todos por Bolivia, pero cuando tendemos puentes siempre los han quemado, pero seguimos con la mano extendida porque el pueblo boliviano quiere vernos juntos a todos los servidores públicos trabajando para que salgamos de una vez de la pobreza”.
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