En una respuesta parlamentaria, el Gobierno de España manifestó que México pidió ayuda ante el "elevado número de asilados" en su embajada en Bolivia y que el país español "albergó temporalmente" a un "reducido número de personas" y que escoltó a varias hasta el aeropuerto en El Alto, "incluyendo a algunas personas que estaban en la Embajada mexicana", según el diario Europa Press.
El medio español tuvo acceso a la respuesta que dio el Gobierno español al grupo parlamentario Vox. En el documento manifiestan que el Gobierno de Jeanine Áñez conocía sobre las salidas de las personas y que no tenían "órdenes de detención de ningún tipo".
España señaló que "con anterioridad" al incidente, la embajadora mexicana, María Teresa Mercado, trasladó a diferentes países una "solicitud de apoyo" ante el elevado número de asilados que acogió "en un primer momento".
Según la publicación, la embajada de España albergó temporalmente y "por razones meramente humanitarias" a un "reducido número de personas que temían por su seguridad física".
Sobre el incidente en la residencia de la embajadora de México, el documento señala que "el de 26 de diciembre el delegado de la UE en La Paz envió un mensaje a las embajadas de los estados miembros en el que señalaba que la delegación de la UE había hecho gestiones para reducir la tensión y había visitado a la embajadora mexicana y añadía que sería muy positivo hacerle visitas para visibilizar el interés y la preocupación de los estados miembros", apunta el texto citado en Voz Populi.
Ante esto, Cristina Borreguero, que actuaba como encarga de negocios ad interim ante el viaje del embajador, solicitó instrucciones a la Dirección General para Iberoamérica y el Caribe del MAUEC.
La respuesta fue que consideraba que la visita "sería oportuna por tratarse de una actuación consistente en contribuir a la reducción de tensiones en aras de la pacificación del país y con el espíritu de colaboración que preside las relaciones de nuestra embajadas con las delegaciones de la UE". España negó que la intención haya sido tener contacto con algún asilado.
Sobre los agentes GEO, España explicó que este personal llegó el 14 de noviembre a Bolivia "a raíz de la escalada de violencia".
Indican que el día de la visita, los diplomáticos llegaron la Embajada mexicana sin problemas y al percatarse de la "importante presencia" de policías en el exterior de la residencia, los GEO salieron fuera de la urbanización.
Tras 40 o 45 minutos de reunión los diplomáticos españoles pidieron que se regresara a buscarlos, y señalan que la Policía boliviana no se los permitió argumentando que se tenían órdenes de no permitir su entrada.
En ese momento, en grupo de personas que se encontraba en el lugar comenzaron a golpear el coche y filmarlos por lo que los GEO cubrieron su rostro y se retiraron.
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