Después de permanecer con arresto domiciliario durante tres meses, el gobernador de Beni, Ernesto Suárez, recuperó ayer su libertad irrestricta luego de que un juez revirtió esa medida cautelar.
En mayo pasado, la juez Narda Vega de la Corte Superior de Justicia de Beni, ordenó el arresto domiciliario del Gobernador opositor al Movimiento Al Socialismo (MAS), con permiso únicamente de asistir a la Gobernación en horarios de trabajo (ocho horas) con custodia policial, dentro del proceso que le sigue el Ministerio Público por presunta malversación de fondos y otros delitos.
Tras conocer la resolución judicial, Suárez manifestó que finalmente se reconoció que él no tiene ninguna intención de huir del país, por el contrario está interesado en defenderse y demostrar su inocencia ante las acusaciones impulsadas en su contra.
En mayo pasado, Vega además del arresto domiciliario le impuso, como medida cautelar, el pago de una fianza de 50 mil bolivianos y su arraigo para que no pueda salir del país.
En este caso, la investigación que se le sigue al Gobernador beniano, es por los supuestos delitos de malversación de fondos, incumplimiento de deberes y conducta antieconómica por aprobar el desembolso de recursos económicos para la reparación de un generador de energía eléctrica en el municipio de San Borja, durante su gestión como prefecto en 2006.
El Gobernador reiteró ayer que todas las acciones judiciales impulsadas en su contra tienen fines políticos, buscan alejarlo de la Gobernación.
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