17 octubre 2010

Encuesta aprueba a Evo y aplaza a García Linera y a 11 ministros


IPSOS: El ministro con mejor calificación es David Choquehuanca, con 29%, y el más criticado es Sacha Llorenti, con 63%.

La última encuesta de opinión política del mes de septiembre, levantada por la empresa IPSOS Opinión y Mercado, muestra que salvo el Presidente, el Vicepresidente y 11 ministros reciben una calificación de aplazo por parte de pobladores de las urbes de La Paz, El Alto, Cochabamba y Santa Cruz de la Sierra.

La ponderación del Jefe del Estado mejoró seis puntos porcentuales con respecto al mes anterior (de 46 a 52); aunque está lejos del 70 por ciento de adhesión que se observó en enero pasado. Mientras que la desaprobación del Mandatario descendió del 47 al 43 por ciento, índice también lejano a los 25 puntos de enero.

El analista cruceño José Mirtenbaum calificó este leve ascenso como coyuntural, pues la muestra fue tomada en momentos en que el Presidente se acercó a la empresa privada y participó en la feria de Santa Cruz, antes de que se produzca el enfrentamiento con los medios por la ley antirracismo y el rodillazo que propinó a un ocasional rival en un partido de fútbol.

El viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, César Navarro, refirió que este nivel de apoyo muestra que “a pesar de los ataques mediáticos y empresariales, el Presidente ha consolidado una imagen y un liderazgo legítimo y fuerte en todo el territorio nacional”.

La otra cara de la moneda es la desaprobación al vicepresidente Álvaro García Linera, que cayó de 53 a 50 puntos, y su aceptación mejoró de 41 a 42 por ciento. IPSOS pidió igual calificar a 11 ministros (más información en la infografía), de quienes el canciller David Choquehuanca recibe el visto bueno del 29 por ciento. Es la calificación más alta, mientras que el titular de Gobierno, Sacha Llorenti, tiene la mayor desaprobación: 63 por ciento.

Mirtenbaum explicó que estas bajas calificaciones son consecuencia de que la gestión gubernamental no es buena y que la población encuestada percibe básicamente problemas en tres áreas: pobreza, corrupción y seguridad ciudadana, contra las que no se ejecutan políticas. “Por ejemplo, la gente comienza a preocuparse por la corrupción que percibe, tiene los mismos niveles de otros gobiernos”.

Navarro cree que este hecho es consecuencia de que el liderazgo del Mandatario es excluyente y actualmente no hay ni en la derecha ni en la izquierda una personalidad como la del Jefe del Estado.

El analista político William Bascopé explicó que el fenómeno de las bajas cotas de los ministros debe obligar a las autoridades a aplicar una mejor gestión pública.

“La gente espera que se ejecuten proyectos con impacto social y económico importante. Las personas sienten que el Órgano Ejecutivo se limita a responder los ataques políticos que recibe y descuida la ejecución de su trabajo específico”. En opinión del abogado, el Gobierno está obligado a desarrollar proyectos, sobre todo económicos, para recuperar el apoyo de las clases medias urbanas, pues tiene una base social leal en campesinos, indígenas, originarios y pobladores de zonas periurbanas de las ciudades más importantes.

“El Órgano Ejecutivo tiene la ventaja de que no tiene oposición; la única expresión contraria es la resistencia de los medios a la ley antirracismo”, concluyó.

Para destacar

El peor momento del Presidente fue en marzo del año pasado, cuando tuvo el 48 por ciento de desaprobación en el país.

En enero pasado, el vicepresidente Álvaro García Linera alcanzó un 63 por ciento de aprobación, su mejor nivel hasta ahora.

García Linera tuvo su peor momento en agosto pasado, cuando sólo el 41 por ciento de los encuestados lo aprobaron.

No hay comentarios:

Publicar un comentario