Los Tiempos
Cuenta un amigo de la infancia de René Joaquino que allí en la mina de Telamayu, donde el candidato pasó su niñez, éste con frecuencia ayudaba a repartir el desayuno y era costumbre que a quienes les tocaba hacer esto eran generosos con sus afines dándoles más de un pan o dos o tres vasos de leche. Pero no el niño René.
“No puedo darles un pan demás porque le estaría quitando su ración a otro niño. Les voy a dar lo que les corresponde”, les decía.
Y esa es la gran carta de presentación del por 12 años alcalde potosino, René Joaquino, su honestidad a toda prueba, virtud que ahora pone al servicio de los más de 5 millones de bolivianos que en seis días más acudirían a las urnas en las elecciones generales del primer domingo de diciembre.
Nacido en una comunidad indígena, en el asiento del ayllu Chicoca Chica, el primer oficio de Joaquino fue pastor de ovejas y llamas.
El alma de Joaquino tiene una gran cicatriz de la que no puede curarse, y siendo pequeño fue testigo de la muerte de su hermano mayor. “Es una historia increíblemente dolorosa para mi”. Una muerte resultado de la pobreza, la incomprensión en la familia y la poca esperanza de resolver los problemas.
Por un problema de salud sus padres se trasladan a la mina Telamayu y un año después, Joaquino también se va con ellos.
Para él el cambio fue un gran impacto porque vivió dos realidades muy diferentes. Un niño viviendo en el área rural luego en los grandes centros mineros.
Cuenta Joaquino, que el Consejo Central Sur significó para el país el sostén económico de muchas décadas y en este centro minero inicia su vida primero mendigando hasta que un día se dijo que eso no era bueno, entonces consigue su primer trabajo como ayudante de albañil y a partir de allí no deja un solo día sin dejar de trabajar.
Pese a que siguió trabajando, René nunca descuidó sus estudios en 1981ingresa al colegio Nacional Mixto Chichas de Telamayu se encuentra con un afiche que le impresiona vivamente. “En ese entonces la figura de Ernesto Che Guevara me llamó la atención, investigue sobre él y me apasionó su doctrina y su forma de pensar, de construir justicia social y dar oportunidades a que las grandes mayoría tengan más opciones de vida”.
A René Joaquino le gustó la idea del Che Guevara de construir una vida equitativa, una sociedad con posibilidades de equidad social con mayor atención en salud y educación, se sintió identificado porque su sensibilidad ya desde niño, se inclinaba hacia esos caminos.
Desde aquel tiempo la política se convirtió en el motor de la vida de Joaquino, pero no la política en términos de juego de poder, sino como el propio candidato la concibe como una herramienta de servicio al pueblo.
Joaquino asegura que es capaz de construir ideales nobles e inducir a todo un pueblo que pueda transitar por la transformación y por el desarrollo. Esa pasión por la política fue cultivada por Joaquino con mucha pasión de manera autodidacta.
Arrepentimiento
Como todo hombre de gran experiencia política, Joaquino sólo se arrepiente de las cosas que no hace. Y es de no haberse presentado y participado en las elecciones de 2005 de los que se arrepiente.
“Debería haberlo hecho. Fue una gran oportunidad, el pueblo boliviano estaba buscando un cambio de liderazgo. Pero un liderazgo que tenga una convicción democrática. Una convicción de cambio, de transformación. Sin necesidad de confrontar, sin egoísmo y rencor. Bolivia necesita un líder que pueda trabajar por todos y todas los que vivimos en esta tierra”.
Para el ex alcalde Potosino, en los dos últimos años la política en el país se ha caracterizado por la polarización y se ha profundizado el racismo. La división entre el campo y la ciudad – según Joaquino – le está haciendo daño al Estado boliviano.
Hacia el futuro
Con esa voz medio ronca, segura, de quien tiene las convicciones firmes, René Joaquino no se asusta ni le atormenta si no llega a la presidencia o a la segunda vuelta, su apuesta va más allá y ve esta elección como parte del proceso de consolidación de su partido hacia el futuro.
Con 43 años, una fortaleza incansable para el trabajo y con una gran experiencia en la administración pública, el candidato de Alianza Social está convencido de que quienes realmente disputan el poder son cuatro partidos. “De esos cuatro tres representan la confrontación. Empujan al pueblo boliviano a la división. A las profundización de nuestras diferencias, a la exclusión, al racismo. Alianza Social emerge con fuerza, con un mensaje de paz, de reconciliación, de unidad. Pero con el firme propósito de transformar el Estado boliviano, renovando liderazgos y nuevas formas de hacer política”.
Según Joaquino, su partido tiene un programa de gobierno que va a fortalecer a Bolivia. Es el tránsito de una pasado centralista que ha fracasado en sus intentos por resolver los problemas del pueblo boliviano hacia la modernidad y la construcción de una sociedad equitativa. “Incluyendo además a todo los bolivianos y bolivianas más allá de la región y de la etnia”.
Ni Manfred ni Goni
Joaquino niega rotundamente que en algún momento haya tenido vínculos con Manfred Reyes Villa o con Gonzalo Sánchez de Lozada.
Cuenta que su esposa participaba en un grupo político junto a otros activistas como Gutiérrez y Gregorio Lanza. En un momento dado este grupo fue invitado por Reyes Villa. “Lo que hice fue darle como esposo apoyarla”. Y en lo que se refiere a Sánchez de Lozada, aquí cuentan los hechos. “Yo nunca he sido candidato de Goni por razones ideológicas. Incluso yo manifesté que si Goni gana su gobierno no va ha durar”.
Joaquino está casado y tiene cuatro hijos. “No los estoy involucrando en la campaña porque todavía están en colegio y prefiero que cumplan con esas sus obligaciones. Mi esposa está cuidando a mis hijos menores. La campaña siempre es dura y no quiero utilizar a mi familia”, asegura el candidato de Alianza Social, cuyos hijos entre hombres y mujeres llegan a cuatro.
RECORRIDO HUMANO Y POLÍTICO
Del campo a la mina
Rene Joaquino Cabrera, nació el 27 de febrero de 1966, en la comunidad el Asiento (Ayllu Chicoca Chico), Cantón Tomave, Prov. Antonio Quijarro del Departamento de Potosí, Bolivia. Sus padres Don Genaro Joaquino Mamani (Albañil) y Dña Felicidad Cabrera Mamani (Ama de casa).
Realizó sus estudios primarios en la comunidad Asiento. En 1974, junto a su familia emigró a Telamayu, concluyendo sus estudios en la “Escuela Bolivia” y, los estudios secundarios en el colegio “Mixto Nacional Chichas”, del mismo centro minero.
Profesional y político
1989, René Joaquino, a raíz de la pobreza, la discriminación, exclusión y la marginación que sucede en nuestro país con una gran cantidad de bolivianas y bolivianos, que obligan a menores de edad a buscar trabajo.
1991, Ingreso a la Facultad de Derecho en la Universidad Autónoma Tomas Frías de Potosí, concluyendo sus estudios en 1995 y, varios diplomas acreditan que era el mejor estudiante. Se graduó ese mismo año. Luego, deseoso de lograr mayores conocimientos estudió Economía en la misma Universidad.
1993, por primera vez incursiona en la actividad política, postulándose como candidato a Alcalde de la ciudad de Potosí por la organización política EJE PACHACUTI.
1994 – 1997, es asesor de la Federación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Potosí, ejerciendo una distinta forma de hacer política.
1999, nuevamente participa en las Elecciones Municipales y, en esta ocasión logra obtener 9 Concejales de los 11 que compone el Concejo Municipal de Potosí.
2004, una vez más, se presenta en las Elecciones Municipales por la ciudad de Potosí como primer Concejal y después de tantos años de implementar una gestión municipal siempre transparente y honesta, recibe el espaldarazo del pueblo potosino, logrando 10 concejales de los 11 que componen y es Alcalde del Municipio de Potosí por el período 2005-2009 una historia inédita y única en Bolivia en una elección Municipal.
Alianza Social emerge con fuerza, con un mensaje de paz, de reconciliación, de unidad... renovando liderazgos y nuevas formas de hacer política
OPINAN SOBRE JOAQUINO
Amigo de infancia
“Mis manos al fuego por René”
Nos conocemos con René desde niño. Hemos estudiado juntos en el Colegio Bolivia de Telamayu y hemos vivido muchos juegos y muchas aventuras. Terminamos el colegio y nos encontramos muchos años después, ya profesionales.
He trabajado a lado de él durante 9 años, como director de planificación de la Alcaldía. Luego cuando René se presentó a las elecciones nos pidió que le acompañásemos en esta su campaña. Él siempre dijo desde joven que él iba a ser presidente de los bolivianos. Y después de 20 años que han transcurrido él ya está logrando su objetivo. Obviamente que ha pasado muchas penurias para legar a eso. Y como muchos de sus amigos yo pongo mis manos al fuego por este hombre. Es un ser incorruptible y nadie los va a acusar de que haya robado un solo centavo a nadie.
El vive y ama su trabajo, es bastante dedicado y atento con la gente. Cuando nos ha pedidos su apoyo nosotros no lo pensamos dos veces y aquí estamos.
Esperemos que para el 2015 René ya esté llevando las riendas de este país para mejorarlo.
RENÉ OPINA SOBRE CANDIDATOS
Román Loayza
“mal pagado
Un líder indígena que ha sido mal pagado. Sin embargo pese a ello continúa en la carrera electoral ahora desde el lado contrario a Evo Morales.
Evo Morales
“comete excesos“
No es el líder que quería Bolivia, lamentablemente ha decepcionado al electorado boliviano. Su caso es interesante porque es al mismo tiempo presidente y al mismo tiempo candidato. Utilizando todos los recursos y se ha apropiado de un medio de comunicación como es el canal 7. Morales está cometiendo excesos y los excesos en democracia se pagan.
Ana M. Flores
“inconsistente“
Una mujer que no ha dado solidez a su programa.
Alvaro García
“terrorista“
No ha olvidado sus viejas mañas de terrorismo. Continúa tan desafiante como siempre y hablando de guerra por todo lado.
Alejo Véliz
“insistente“
Un líder que participó y quiere seguir participando.
Manfred Reyes V.
“le fue mal“
Lo único que sé es que una persona que ha tenido cuatro oportunidades pero le fue muy mal y se equivocó al aliarse con un presidente que se estaba cayendo y al caerse estigmatizaba a todos los que estaban con él. Hoy Bolivia no le perdona, sobre todo en occidente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario