Quillacollo es el segundo municipio de mayor importancia de Cochabamba, y el próximo 18 de diciembre eligirá a un nuevo alcalde, luego de atravesar una larga crisis desde el año 2004, tiempo en el que se cambiaron a nueve alcaldes.
Tres abogados, Charles Cristhian Becerra de la agrupación ciudadana Unidad Nueva Esperanza (UNE), Miguel Edwin Guzmán Achá del Movimiento Al Socialismo (MAS) y René Fernández Céspedes del Movimiento Sin Miedo (MSM) asumen el reto de conducir las riendas de esa Alcaldía.
El año 2004, el alcalde electo, Ricardo Mercado, del MAS, fue retirado del cargo por presión de militantes de su mismo partido por presuntas irregularidades en la ejecución de un plan maestro de agua potable.
Fue sustituido por Hugo Miguel Candia, del MAS, pero continuó la pugna por el poder político al interior de ese partido, situación reflejada en los nueve reemplazos de alcaldes, ocho del oficialismo, y uno del UNE.
Estos cambios se dieron por presiones y movilizaciones populares, que por momentos se tornaron bochornosas.
En las últimas elecciones municipales, Héctor Cartagena, de UNE, fue suspendido luego de que concejales del MAS interpusieran procesos en su contra por el delito de corrupción.
A la suspensión de éste, la abogada Carla Lorena Pinto, del MAS, asumió el cargo de manera interina. Al concluir el interinato se convocó a elecciones.
Según el ex presidente del Concejo Municipal, Lorenzo Flores, del Frente para la Victoria (FPV), la crisis tiene tres causas: los actores del MAS que “cercenaron el proceso de cambio”, la “política de persecución” a autoridades y dirigentes, la nula capacidad de gestión, así como una constante improvisación en cada acción desde la Alcaldía.
Los tres candidatos deberán responder a un municipio que no cuenta con un Plan de Desarrollo Municipal ni de ordenamiento territorial y que hoy enfrenta conflictos de límites con cuatro municipios: Tiquipaya, Vinto, Colcapirhua y Sipe Sipe.
El problema mayor
La inseguridad ciudadana es uno de los temas urgentes que deberá resolver la futura autoridad. Quillacollo ya sido catalogada como uno de los tres municipios a nivel nacional con el mayor índice delictivo, junto a El Alto y Montero.
En esa ciudad valluna, un promedio de 4,3 hechos delictivos al día son atendidos por la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) de un total de 132 casos en el mes de noviembre.
Asimismo la división Protección a la Familia reportó 210 casos entre los que se encuentran los delitos de violación y maltrato intrafamiliar, según informó el comandante regional de la Policía de Quillacollo, Gualberto Albornoz.
Para llevar el proceso se determinó auto de buen gobierno, pero habrá un corredor vial para transporte interdepartamental.
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