El gobernador del Beni, Ernesto Suárez, acusó este martes al vicepresidente Álvaro García Linera de estar detrás de los presuntos "golpes de Estado" en los departamentos de Beni y Santa Cruz.
"Se está gestando el golpe de estado y hay que denunciarlo así de claro, a través de las instrucciones que ha dado el gobierno, fundamentalmente el vicepresidente de la República que es el que está detrás de todo esto", incriminó la autoridad departamental.
En esa línea, Suárez sostuvo que García Linera tendría cierto interés en la Gobernación del Beni, por lo que denunció estos hechos y más aún los procedimientos que se utilizan para llegar, presumiblemente, a este fin.
El gobernador explicó que la forma de gestar estos presuntos golpes de estado en Santa Cruz y Beni parte de la intención del gobierno de obtener el control de las Asambleas Departamentales. "Quieren quitarnos en este caso el apoyo que se tiene y de esa manera hacer un desequilibrio", apuntó.
En las últimas semanas surgieron una serie de irregularidades en las Asambleas Departamentales de Beni y Santa Cruz. En la primera, los asambleístas del MAS Inocencio Yubánure y Mary Luz Coimbra acusaron a funcionarios vinculados supuestamente al gobernador Suárez, de haber pretendido sobornarlos para no asistir a una sesión de la Asamblea, donde se iba a tratar la Ley de Cesación de Mandato de Autoridades Electas.
En Santa Cruz, el presidente de la Asamblea Legislativa Departamental, Alcides Villagómez, fue aprehendido por no dar curso a un fallo judicial que ratificaba la decisión del Tribunal Supremo Electoral sobre la designación de una nueva asambleísta representante del pueblo indígena Yuracaré-Mojeño, Rosmery Gutiérrez (MAS).
El gobernador de Santa Cruz, Rubén Costas, también denunció que el gobierno pretende ejecutar un golpe de Estado departamental en la capital del oriente boliviano.
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