La Alcaldía de Achocalla bajo control del Movimiento Al Socialismo sufrió una extraña pérdida de Bs 440 mil proveniente de la recaudación de impuestos a bienes inmuebles. El hecho ocurrió en julio, el dinero desapareció en agosto y el alcalde Telmo Félix Mamani Alba formalizó querella recién en octubre del 2010 contra los supuestos autores. La tardía reacción del ejecutivo edil no gustó al Concejo Municipal que el 30 de septiembre presentó su querella contra Mamani ahora investigado por el fiscal Freddy Cabezas Vélez Ocampo de la Fiscalía Adscrita a la FELCC de El Alto con el caso asignado Nro. 3648/10 M.P. y FELCC 2795/10 de la División Corrupción Pública a cargo del investigador Primo Zabala.
El memorial firmado por el presidente Sabino Mamani y los concejales Rubén Quispe y Magda Gamboa (MAS) acusa al Alcalde por los delitos de apropiación indebida, peculado, uso indebido de influencia, incumplimiento de deberes y conducta antieconómica, por cuanto él estuvo informado de la existencia del dinero y no hizo nada para poner a buen recaudo, además que reaccionó tarde ante ese daño económico, sostiene el memorial firmado.
Sin embargo, el Alcalde sostiene que los implicados son cuatro funcionarios de la dirección administrativa y la Oficialía Mayor. El 13 de septiembre, la Unidad de Recaudaciones informó al fiscal que el 20 de julio de 2010 cobró la suma de Bs 440.061 por impuestos a la propiedad de Bienes Municipales desde 2004 a 2008 y a la transferencia de bienes inmuebles a la inmobiliaria Arboleda del Sur S.A. y Empresa Inmobiliaria Bosque Grande.
De acuerdo a la denuncia, ese monto fue entregado sin recuento ni comprobante de ingreso al encargado de Caja Fuerte del Área de Tesorería, Juan Wily Fernández Choque, por el ex oficial mayor administrativo, Darío Quinteros, el encargado de Sistema y Recaudaciones, Jorge Wilson Yugar Maldonado y el cajero Julián Mamani Quispe.
SE PERDIÓ EN MEDIO DE LA FIESTA
El dinero se extravió cuando había cambio de personal y se producía la fiesta del pueblo de Achocalla. Ante ese hecho, el Alcalde presentó un aviso ante la Policía local el 17 de agosto sin mayores argumentos, pero oficializó querella el 7 de octubre contra los funcionarios administrativos.
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