La Alcaldía de Cercado alcanzó a ejecutar el 55 por ciento del Plan Operativo Anual (POA). Se informó que en la gestión de Edwin Castellanos, en los siete meses al frente del gobierno local, se invirtió más de la mitad del presupuesto municipal (que en 2010 fue de 796 millones de bolivianos) en obras, servicios, pago de deudas y gastos de funcionamiento en los 14 distritos.
El Alcalde enumeró los principales obstáculos que tuvo para llegar al 100 por ciento de la ejecución. Entre los escollos destacó la reorganización de la Alcaldía y la deuda con los acreedores, bancos y el Tesoro General de la Nación. La deuda a pagarse a corto plazo es de 138 millones de bolivianos, por lo que no sólo se destinaron los ingresos por el pago de impuestos a bienes inmuebles, sino que además se sacrificaron algunas obras en los distritos.
El informe fue difundido en la primera rendición pública de cuentas que realizó la Alcaldía a la comunidad. Sin embargo, el único concejal que asistió dicha difusión, Edwin Jiménez, expresó su desconfianza sobre la veracidad del porcentaje ejecutado y según él, la ejecución en obras sería del 40 por ciento.
El Alcalde explicó que las autoridades anteriores dejaron una Alcaldía con “una alarmante iliquidez” –con una deuda de 96 millones de bolivianos mientras que en caja había sólo 800 mil bolivianos– y una pobre ejecución del POA, que en mayo llegó al 16 por ciento.
Según el oficial mayor administrativo y financiero, Osvaldo Delgadillo, actualmente se siguen procesos contra ex funcionarios con el objetivo de recuperar 21 millones de bolivianos. Agregó que de acuerdo a los datos del sistema “Sigma”, la situación financiera del municipio al 31 de diciembre se traduce en 3.418 millones bolivianos en activos, de los cuales los activos corrientes representados en cuentas por cobrar, bienes en almacenes y otros alcanzan 431 millones bolivianos. El activo no corriente que está por los bienes de uso y bienes de empresas no descentralizadas alcanza los 2.700 millones de bolivianos.
Por otro lado, el presidente del Comité de Vigilancia, Alejandro Cavero, justificó la baja ejecución presupuestaria con todos los problemas heredados de la gestión anterior y se mostró esperanzado en que en el siguiente informe los resultados sean alentadores.
OBRAS CONFLICTIVAS Y POSTERGADAS
Otro de los informes más esperado y detallado fue el que brindó el oficial mayor técnico, Leonardo Anaya, quien a manera de preámbulo nombró las obras con problemas y de gran impacto, por ejemplo, el túnel del Abra, proyecto que desde su inicio atravesó una serie de conflictos. Dijo: “La construcción de este túnel viene casada con el camino de acceso y la construcción de la avenida Guayacán. Ambas obras están paralizadas y en análisis en la contraloría”.
Mencionó también proyectos como el hospital del niño, que fue paralizado porque padecía de graves observaciones técnicas. Anaya aseguró que se están reafirmando los recursos para que en esta gestión se concrete dicha obra así como la construcción del hospital del sur. Entre los proyectos más complicados, el oficial mencionó a la academia de música Man Césped. Explicó que “la obra tiene tres etapas, lo que no permite la norma, con una empresa ejecutora sin experiencia, sin solvencia financiera que sigue pataleando, tenemos alrededor del 80 por ciento, esperamos empezar la tercera fase en esta gestión”.
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