Tras ratificarse la acusación formal contra el gobernador de Tarija, Mario Cossío, la directiva de la Asamblea Legislativa Departamental de esa región determinó convocar a sesión el lunes para nombrar, por mayoría absoluta, al reemplazante de la autoridad departamental.
Cossío es acusado por incumplimiento de deberes y conducta antieconómica en el caso denominado Imbolsur. En 2006, el ex prefecto firmó un contrato con la empresa Imbolsur para la adquisición de 2.990 toneladas de cemento asfáltico; de por medio existía una póliza de garantía que ascendía a 1.339.100,70 bolivianos. Cossío no verificó la vigencia de la garantía y fue acusado por que el Estado no obtuvo esa cantidad por incumplimiento de contrato, según ANF.
El abogado de Cossío, Carlos Alarcón, dijo que el proceso contra su defendido no es otra cosa que persecución y “vendetta” política. Dijo, sin embargo, que tiene los argumentos suficientes para demostrar la inocencia de la autoridad tarijeña que fue parte de la denominada media luna, firme opositora al Gobierno del presidente Evo Morales.
La acusación formal presentada ayer abre la posibilidad para la suspensión temporal del gobernador Cossío al amparo del artículo 114 de la Ley Marco de Autonomías.
En tanto, el gobernador de Santa Cruz, Rubén Costas aseguró que el MAS pretende acelerar los proceso contra sus opositores. “En mi caso, de una vez quieren adelantar con el proceso totalitario para matarnos civilmente. Hay una cierta complicidad y dejadez de la comunidad internacional”, explicó.
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