Pese a las limitaciones que persisten desde el Gobierno central, algunos municipios del país apuestan a incrementar sus ingresos propios. Si bien en la mayoría de los casos los recursos transferidos por el Tesoro General de la Nación (TGN) representan la mitad o más de sus presupuestos anuales, no faltan las iniciativas a cual más original.
En Tarija, el alcalde Óscar Montes puso en marcha obras dirigidas a convertir al municipio en un destino turístico por su proximidad al norte argentino. A orillas del río Guadalquivir ya se construyó un puente y una avenida ancha, donde se edificarán locales en un área de 12.000 metros cuadrados, para luego ser alquilados o dados en concesión a dueños de karaokes, discotecas y peñas folclóricas. Según Montes, este proyecto le generará al municipio cerca de $us 300.000 al año.
También se aprobó el cobro de una tasa a personas mayores por el uso de canchas deportivas municipales con pasto sintético. Niños, deportistas y estudiantes no pagan.
El albergue municipal que acoge a delegaciones también genera algunos recursos por la prestación del servicio.
Si bien la ley de clasificación de impuestos prohíbe a municipios y gobernaciones crear tributos, Montes apunta a la creación de empresas públicas o mixtas que a la larga permitan convertir a la capital en un municipio autosostenible. En ese afán, incluso se están haciendo gestiones para crear un surtidor de administración mixta, la Alcaldía pone el terreno y una empresa privada, los equipos.
Del total del presupuesto, cerca del 30% representa los ingresos propios y el resto transferencias del Gobierno, especialmente el Impuesto Director a los Hidrocarburos.
En la capital paceña, la principal apuesta es el incremento de las recaudaciones impositivas. Ramiro Gamboa, director de Finanzas, asegura que el municipio de La Paz es el que más recursos propios genera en todo el país. Mientras el dinero transferido desde el TGN asciende a Bs 782 millones al año, los ingresos propios son Bs 581 millones.
Las autoridades decidieron apartarse del sistema tradicional establecido por el Ministerio de Finanzas para el cobro de impuestos (inmuebles y vehículos), tasas y patentes, porque este les permitía disponer de recursos recién en septiembre de cada año. Mediante una ley municipal, la Alcaldía ha creado el cobro con descuentos escalonados. Unos meses es con el 15% de descuento, luego con el 10% y, finalmente, con ningún descuento. Según Gamboa, en 20 días de aplicación de este nuevo sistema se ha recaudado más de Bs 100 millones.
Paralelamente, se aprobó dos ‘perdonazos’: uno para los propietarios de las construcciones fuera de norma y otro para quienes deben impuestos de inmuebles. No se les cobra multas ni intereses, si se ponen al día en sus tributos. Con esta medida, se pretende recaudar Bs 120 millones este año.
A diferencia de Tarija, Gamboa explica que La Paz se juega por el tema tributario, porque representa gran parte de los recursos propios. De un total de Bs 581 millones, los tributos son Bs 477 millones.
El director reconoce que muchos municipios pequeños no tienen la debida capacitación para poder generar nuevas políticas que aumenten sus ingresos, sin tener que depender de las transferencias del TGN. También lamenta que el Gobierno no otorgue la autonomía necesaria para que las regiones creen impuestos.
En Santa Cruz, el oficial mayor de Administración, Manuel Medina, anuncia que se están haciendo gestiones para concretar un crédito del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) que permitirá mejorar las tareas de catastro. El Viceministerio de Tesoro y Crédito Público y el BID ya aprobaron la propuesta del municipio y se espera que en 2013 este proyecto aumente los ingresos propios de 37 a más del 50%.
La iniciativa se da después de que el Gobierno Municipal intentó en 2003 que la empresa Odenal elaborara un catastro que hasta ahora no existe. Por el contrario, la empresa le inició un juicio al municipio.
Hoy, el 55% de los Bs 2,2 millones de presupuesto central del municipio (sin contar hospitales ni escuelas) son transferencias del TGN. Medina reconoce que la Alcaldía cruceña tiene una mora muy elevada en impuestos a inmuebles y vehículos, por lo que se está viendo nuevas formas para que la gente se ponga al día.
Gobernación dice que se promueve la ‘pereza fiscal’
“Hay gobiernos municipales y departamentales que se quedan tranquilos esperando las transferencias. A muchos municipios pequeños y medianos, además de las gobernaciones oficialistas, no les interesa generar recursos propios, porque piden al TGN y les dan plata”, asegura José Luis Parada, secretario de Finanzas de la Gobernación cruceña.
Según Parada, todo el marco legal establecido en la nueva Constitución Política del Estado y la Ley marco de Autonomías, además de la Ley de Clasificación de Impuestos, está elaborado para la centralización de los recursos.
Los ingresos propios de la Gobernación cruceña no superan el 5% (cerca de Bs 25 millones) del total del presupuesto anual, que llega a Bs 800 millones.
Parada incluso acusa al Gobierno de haberse apropiado de dos impuestos planteados por la Gobernación cruceña. La primera propuesta era cobrar Bs 1 por litro de cerveza consumida en la región, dinero que iba a estar destinado a salud, teniendo en cuenta que en Bolivia se consumen 300 millones de litros de esta bebida al año. La segunda propuesta era crear un tributo a los juegos de azar. El Gobierno emitió decretos aprobando ambos impuestos, pero para que sean manejados por el TGN. “Nos dijeron que en 2011 nos iban a dar Bs 1,2 millones de lo recaudado en los juegos, pero no nos dieron ni un centavo”, se queja.
Consultado sobre por qué no se generan proyectos que aumenten los ingresos, Parada dice que a la Gobernación le hubiese interesado ser parte de la explotación de Mutún, pero que lamentablemente ese tema también está en manos del Gobierno.
Según Parada, la Gobernación no puede crear empresas públicas porque sería como hacerle competencia al sector privado y que más bien se enfoca en ejecutar obras viales que apoyen la producción.
EL DEBER envió preguntas sobre el tema a las gobernaciones de Cochabamba y Beni, pero no hubo respuesta.
Recursos propios son desarrollo
Carlos Hugo Molina / Analista
Estamos frente a la posibilidad de poner en ejercicio lo que tanto se discurseó: primero, la aprobación de leyes departamentales, competencia que todavía no hemos empezado a de-sarrollar a plenitud y, segundo, el federalismo fiscal, que es la posibilidad de cobrar impuestos para no vivir solo de las transferencias. Se debería detectar dónde se puede aplicar nuevos tributos o tasas.
A veces es más fácil esperar las transferencias que crear impuestos porque causan malestar en la gente y hasta pueden hacer impopulares a las autoridades, pero desde la sostenibilidad, los ingresos propios marcan la diferencia en el desarrollo.
La cifra
37
Es el porcentaje de recursos propios del municipio cruceño con relación al presupuesto central. El de La Paz es 74% y el de Cochabamba, 30%.
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