El Movimiento Al Socialismo (MAS) y el Comité pro Santa Cruz organizaron grupos juveniles de choque en Santa Cruz. Los oficialistas son unos siete, cuyo contrapeso es la Guardia de Honor de la Unión Juvenil Cruceñista (UJC), en proceso de rearticulación.
Estas escuadras se formaron después de agosto y septiembre de 2008, cuando se produjo lo que el Gobierno definió como un intento de golpe de Estado cívico-prefectural en los departamentos de la “media luna”: Tarija, Santa Cruz, Beni y Pando, a los que se adscribió, en alguna medida, Chuquisaca.
La UJC se reorganizó después de que quedara prácticamente disuelta luego de la devolución de las instituciones gubernamentales tomadas por grupos de jóvenes entre agosto y septiembre de 2008.
A partir de ese momento, el liderazgo de David Sejas, actualmente refugiado político en Brasil, se debilitó a grado tal que dio paso a una nueva dirigencia que no logró aglutinar a sus integrantes.
Ángelo Céspedes, Ángel “Chichi” Pérez y otros connotados integrantes de la UJC se pasaron a filas del MAS.
Sin embargo, la Unión logró rearticularse y, el sábado 8 de mayo, Samuel Ruiz asumió la presidencia del órgano.
En su discurso de posesión, Ruiz dijo: “Este glorioso símbolo cruceño ha sido obligado a batallar en aguas turbulentas; y sus capitanes, líderes de turno, no estuvieron a la altura para comandar esta nave a la victoria”.
La intención de Ruiz es renovar la UJC para que pierda la imagen de un mero grupo de choque.
Sin embargo, pervive la Guardia de Honor (su nuevo presidente es Willman Cuéllar), que sigue siendo el grupo que brinda seguridad y escolta en los actos masivos que organiza el ente cívico.
Ángelo Céspedes restó legitimidad al nuevo directorio porque, dijo, toda la estructura tiene alguna relación de parentesco o de dependencia laboral con el presidente cívico Luis Núñez o con el gobernador electo Rubén Costas y anunció que presentará una organización juvenil departamental cuyo objetivo será hacer propuestas a la Gobernación y al Órgano Ejecutivo.
La Guardia de Honor está compuesta por jóvenes escogidos en virtud de su fuerza física, estatura y corpulencia. Entre agosto y septiembre de 2008 utilizaron palos y se armaron con escudos para enfrentar a jóvenes del Plan Tres Mil y en el asalto a las oficinas estatales.
El líder de la Central Obrera Departamental cruceña, Lucio Vedia (MAS), sindicado de organizar los grupos de choque, denunció que sus militantes portan y usan explosivos y armas. Un dirigente del Comité pro Santa Cruz que pidió reservar su identidad negó esa versión y dijo que, por el contrario, la UJC dirige actividades como las del ballet folklórico Los Querembas, aunque admitió que los integrantes de la Guardia de Honor se entrenan regularmente.
La UJC tiene 53 años. Fue fundada por Carlos Valverde Barbery, líder del Movimiento Federalista Democrático (MFD), quien reveló el 25 de septiembre de 2004, a El Deber, de Santa Cruz, que aspira a una nación federal formada por los departamentos de Santa Cruz, Beni, Pando y Tarija.
Ruiz, en su posesión, reivindicó la figura de aquel luchador independentista cruceño, de 83 años de edad.
En contrapartida, el MAS organizó al menos siete grupos juveniles, que cumplen similares funciones que la Guardia de Honor: garantizar la seguridad de Evo Morales, Álvaro García Linera y otras autoridades nacionales cuando visitan Santa Cruz y evitar disturbios públicos en los acontecimientos oficialistas.
El grupo Inti Bolivariano del Plan Tres Mil es uno de los más importantes. Sus integrantes lucen poleras y boinas rojas. Tienen estructura y disciplina.
Otros grupos son Los Guevaristas, Luis Espinal, Marcelo Quiroga, la Juventud Igualitaria Andrés Ibáñez, Los Chiriguanos y Cañoto, cada uno con su propia estructura, organización interna y uniformes propios.
Lucio Vedia asegura que no se trata de grupos de choque. “Son organizaciones formadas por jóvenes sanos, con ideología, que luchan por la unidad del país, que buscan beneficios sociales y, por eso, han firmado convenios con universidades como la Cristiana de Bolivia, Gabriel René Moreno y Domingo Savio y se adscribieron al programa Mi Primer Empleo Digno del Ministerio de Trabajo”.
El dirigente sindical dijo que, si bien estos jóvenes resguardan a las instituciones estatales de las ambiciones de grupos de poder, no cumplen programas de entrenamiento físico ni portan armas de fuego, blancas o palos.
“Los integrantes de estas organizaciones son hijos de dirigentes, muchachos con ansias de superación y pocos recursos que encuentran en estos grupos un espacio en el que desarrollar sus ideas, ambiciones y sueños de progresar y ser mejores bolivianos cada día”.
Estos conjuntos de jóvenes, en criterio del entrevistado, surgieron como una respuesta a la intención “de los influyentes Rubén Costas, Guido Nayar, Branko Marinkovic y otros, que desde la posesión misma de nuestro hermano Evo Morales como presidente se dedicaron a desestabilizar, intentaron un golpe, casi paralizan a la Asamblea Constituyente con los dos tercios y agitaron con los referendos revocatorio y autonómicos”.
De los líderes de aquella oposición, sólo Rubén Costas, gobernador electo, continúa en Santa Cruz, pues Marinkovic, Nayar y otros huyeron del país por temor a ser aprehendidos por el Ministerio Público, que investiga las actividades presuntamente terroristas dirigidas por Eduardo Rózsa Flores en Bolivia.
La oposición tiene en Santa Cruz su bastión, aunque en términos absolutos, de acuerdo con la votación del 4 de abril, la primera fuerza política en ese departamento es el MAS.
Costas ganó las elecciones, pero no tendrá control absoluto sobre la Asamblea Legislativa Departamental.
Ante esa situación de equilibrio político, la lucha se traslada a las calles, donde los grupos juveniles de choque tienen protagonismo, como se observó en diversos incidentes.
La UJC fue fundada hace 53 años por Carlos Valverde Barbery.
El Plan Tres Mil, bastión masista
En 1983, una crecida del río Piraí dejó sin techo a unas 3.000 familias en Santa Cruz de la Sierra. Sergio Antelo era el alcalde de la capital cruceña y dispuso que esas familias se asentaran en una zona baldía y alejada de la ciudad. Transcurridos 27 años, esa zona es un bastión del Movimiento Al Socialismo (MAS) en ese departamento.
Antelo fundó, años más tarde el Movimiento Nación Camba e incluso es investigado por el Ministerio Público a causa de su presunta vinculación con Eduardo Rózsa Flores. Esas 3.000 familias urbanizaron la zona y crearon el Plan Tres Mil, pero su verdadero nombre es Ciudadela Andrés Ibáñez. Sus pobladores tienen la aspiración, 27 años después de que el turbión los echara a esa región alejada. de convertirse en una nueva sección municipal que se denominaría Ciudadela Igualitaria Andrés Ibáñez, autónoma de la administración de la Alcaldía de Santa Cruz y de la Gobernación.
A ese reducto llegan Evo Morales, Álvaro García Linera y los dirigentes del MAS, aunque los opositores posesionaron el último fin de semana a los cívicos del Plan Tres Mil en un acto que contó con delegados de unos 60 de los 107 barrios de toda el área.
No hay comentarios:
Publicar un comentario