En un ambiente tranquilo y hasta festivo, a diferencia de otros distritos donde hubo protestas y peleas, la Corte Departamental Electoral (CDE) de Cochabamba entregó ayer sus credenciales al 95 por ciento de los 662 alcaldes, alcaldesas, concejales, concejalas y asambleístas, electos en las elecciones del pasado abril, según cálculos del presidente de la CDE, Joaquín Pérez Mercado.
El único hecho que tensionó el ambiente en el coliseo Villazón de La Costanera, donde se llevó a cabo el acto, fue unas cuadras más al norte, en el templo de Cala Cala, un piquete de seis militantes de Unidad Nacional-Consenso Popular (UN-CP), más conocido como Todos Por Cochabamba, había ingresado a su sexto día de huelga de hambre en protesta por los siete escaños de asambleístas departamentales, teóricamente asignados de manera injusta al Movimiento Al Socialismo (MAS).
El presidente de la CDE dijo que después del pronunciamiento de la Corte Nacional Electoral (CNE) del martes pasado, todo el conflicto de escaños era “caso cerrado” para su gestión.
Destacó que con este acto, los vocales han cumplido con la última actividad que tienen en su calendario, antes del cierre de su gestión que culminará con la elección de nuevos vocales que serán elegidos por las próximas asambleas departamentales electorales.
Por lo demás, el acto cobró ambientes festivos con los seguidores de Héctor Cartagena, alcalde electo de Quillacollo por Unidad Nueva Esperanza (UNE), que ayer llegaron al coliseo en dos buses para ovacionar a su líder haciendo callar incluso a la mayoría masista. Hubo abrazos de felicitación, fotografías y entrega de gigantescos panes de Arani. Se prevé que las nuevas autoridades asuman sus cargos a partir del 30 de mayo conforme al calendario electoral.
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