El grupo de trabajo del Foro de Sao Paulo instó ayer a Chile a terminar con el encarcelamiento "arbitrario e injusto” de siete funcionarios aduaneros y dos militares bolivianos, que el miércoles fueron enviados a una prisión en ese país con detención preventiva.
Esa posición fue inscrita en una resolución aprobada por unanimidad por los miembros del Foro.
Esa instancia consideró que las decisiones del Estado chileno sólo profundizan la conflictividad limítrofe. La reunión central del Foro de Sao Paulo se realizará en julio de este año en Managua, Nicaragua.
El Gobierno boliviano denunció que el pasado 19 de marzo, carabineros chilenos ingresaron en Bolivia y secuestraron a los nueve connacionales, cuando realizaban operativos de lucha contra el contrabando en frontera.
No obstante, el 22 de marzo, la justicia chilena decidió remitirlos a la cárcel por al menos 120 días hasta que concluya la investigación preliminar, acusándolos por los delitos de robo con intimidación y violencia, porte y tenencia de armas prohibidas y contrabando.
El fiscal chileno Hardy Torres explicó ese día que el delito de robo con intimidación tiene una pena de hasta 15 años de prisión; que la falta de porte ilegal de arma prohibida se castiga con hasta 10 años de encierro, y el delito de contrabando se castiga con tres años.
La determinación de detención preventiva fue rechazada por autoridades del Gobierno, quienes anunciaron que Bolivia acudirá a la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
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