Como se anunció hace cuatro días, el senador del Movimiento Al Socialismo (MAS), Félix Martínez, presentó su renuncia al curul asignado por el departamento de Santa Cruz. Esta dimisión que en primera instancia fue rechazada por el oficialismo, fue reiterada con el carácter de “irrevocable”, argumentando que su labor será más eficiente en el trabajo con su circunscripción en la población de San Julián.
El ahora exsenador suplente de Gabriela Montaño, titular de la Cámara Alta, dijo a los medios locales que tuvo conflictos con la citada legisladora sobre todo por las funciones que debía asumir su persona en escazas oportunidades.
En efecto, Martínez sólo podía asumir la representación dentro de la Asamblea Legislativa cuando Montaño dejaba la Sede de Gobierno, situación que no se producía con frecuencia, porque como presidenta del Senado debía continuar su labor cada semana y cada mes.
“He presentado mi renuncia irrevocable al presidente de la Asamblea Legislativa Plurinacional que es el presidente Álvaro García Nacional con copia al Senado Nacional, hubo problemas de falta de coordinación con la presidenta del Senado, el tema del rol que tienen que jugar los suplentes de la Cámara de Senadores y Diputados”, declaró el representante cruceño.
Martínez fue crítico a situaciones dentro del Legislativo e incluso pidió la renuncia en su momento, de la ministra Anticorrupción, Nardi Suxo, tras el descubrimiento de la denominada red de extorsión.
Asimismo, expresó su malestar por la forma de aprobación de normas en el primer poder del Estado, porque su desacuerdo no fue tomado en cuenta. Empero, reiteró que no deja al oficialismo como organización política y seguirá trabajando para fortalecer los años que restan del gobierno del régimen del MAS.
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