Una comparación entre las preguntas de los censos de 1992, 2001, y del que tendrá lugar el miércoles, deja ver que las diferencias entre ellas están en la manera en cómo se formulan y en la profundidad que tratan de indagar.
Entre las interrogantes se presentan continuidad, inclusión de nuevas preguntas y exclusión de otras. A continuación se presentan algunos ejemplos.
En el operativo de 1992 se registró el número de personas fallecidas de la vivienda. En el proceso de 2001, se consultó si se produjo uno o más fallecimientos; además, si la persona fallecida era mujer, se indagó la causa de la defunción, algo que la boleta de 1992 no tenía.
Para este año, la pregunta sobre mortalidad nuevamente incluye el número de personas fallecidas, como en 1992.
En el ámbito de las características de las personas, en 1992 se preguntó si el individuo tenía cédula de identidad. En 2001 se sustituyó la interrogante, con la pregunta de si su nacimiento estaba inscrito en el Registro Civil. El censo 2012 preguntará, además del registro, si la persona tiene carnet de identidad.
La pregunta sobre situación de discapacidad se incluyó en el cuestionario de 2001 e intentó conocer el número de personas en esa situación. Para el operativo censal de este año, esa interrogante tiene un mayor detalle, pues profundiza la indagación sobre el nombre, el sexo y la edad de la persona en esa situación.
En 1992 se preguntaba a las mujeres, de los hijos que tuvo cuántos vivían en el exterior. La boleta actual, registra la emigración de parientes y pregunta si desde 2001 alguna persona que vivía en el domicilio radica en otro país, además que investiga sobre su sexo, año de salida, la edad en que se fue y la nación donde vive en la actualidad.
En el ámbito de las características de la vivienda, en 2001 se preguntó si se usaba energía eléctrica. Este año, además de consultar si un hogar tiene ese servicio, también se averigua la fuente: red de empresa eléctrica, motor propio, panel solar.
En 2001 se incorporó la pregunta sobre los idioma o lengua con la que aprendió a hablar la persona, pregunta que continúa.
En 2001 se incorporó también la pregunta sobre pertenencia a un pueblo indígena originario. La boleta censal de este año averigua sobre el mismo tópico, pero a diferencia de aquel proceso, ahora el empadronador no debe leer las opciones de respuesta.
En el censo 1992 se preguntó acerca de cuántas personas había en el hogar que pertenecían a una religión. El cuestionario censal de 2001 ya no incluyó esa interrogante ni tampoco lo hace el documento actual.
La boleta 2012 incorpora la pregunta sobre eliminación de basura, además de la de consulta sobre la emigración internacional. De igual forma pregunta el lugar donde acude alguien cuando tiene problemas de salud.
En términos formales, el cuestionario censal de este año contiene una batería de 49 preguntas, seis menos que las que tuvo el operativo de 2001 y cuatro más del censo de 1992.
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