“Como siempre aquí nosotros firmes, ya son 25 días que estamos en constante vigilia para no permitir que estos delincuentes salgan de aquí y se den a la fuga, lo que queremos es que den la cara y rindan cuentas como corresponde”, dijo el miembro de ese grupo, Gustavo Aramayo, en declaraciones al canal estatal Bolivia TV.
El activista informó que a la fecha no se registraron movimientos y visitas irregulares, desde el impasse ocurrido en diciembre de 2019, aunque -dijo- esa no es razón para dejar la guardia en ese lugar.
Indicó que esa vigilia está compuesta por jóvenes oriundos de los departamentos de Potosí, Tarija, Santa Cruz y Beni, que tienen un compromiso con Bolivia y la democracia.
“No hay problemas con los policías (que resguardan ese lugar). Si como decimos nadie se cansa y nadie se rinde, nosotros seguimos de pie firmes hasta las últimas consecuencias”, afirmó.
A fines de diciembre de 2019, encapuchados del GEO (Grupo Especial de Operaciones) de España a bordo de vehículos con placas diplomáticas intentaron ingresar a la residencia de la embajadora de México en La Paz, según un reporte oficial de la Policía.
Para el Gobierno boliviano, esa acción podría haber tenido el objetivo de sacar a una de las exautoridades bolivianas que debe rendir cuentas a la justicia boliviana, como es el exministro Juan Ramón Quintana, quien está acusado por terrorismo y sedición.
Ante esa situación, la Cancillería boliviana denunció el abuso de privilegios y el atropello a la soberanía del país por los funcionarios de España en La Paz, que vulneraron la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas.
Ese mismo día, jóvenes y vecinos del lugar instalaron una vigilia para evitar la fuga de algunas exautoridades bolivianas que se encuentran asiladas en esa legación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario