Cívicos y el Conade le dan 48 horas a Evo para renunciar y le piden a las FFAA ponerse del lado del pueblo

Este sábado 2 de noviembre en Santa Cruz, como en varias otras regiones del país, se vivió un Todos Santos diferente a los de los anteriores años. Esta fecha encontró a una gran parte de la ciudadanía en pie de lucha, reclamando la anulación de las elecciones del 20 de octubre y a los miles que se reunieron a los pies del Cristo Redentor, dándole un plazo de 48 horas a Evo Morales para que abandone el palacio de Gobierno.

Que la gente se congregue a las 19:00 en el Cristo para escuchar al líder cívico Luis Fernando Camacho su evaluación de la jornada de paro y la inauguración de la siguiente es normal desde que, hace 11 días, se inició el paro indefinido en la ciudad de Santa Cruz. Sin embargo, este sábado fue diferente. No solo fue Camacho el que se dirigió a la masiva concentración, sino también dirigentes cívicos y del Conade de Tarija, Pando, Oruro, Cochabamba y La Paz.

Pero no fue diferente solo por eso, sino por el anuncio que se hizo y el encargado de transmitirlo fue el líder cívico cruceño. Comenzó consultando a los miles de allí reunidos si estaban de acuerdo con que se envíe una carta a las Fuerzas Armadas de Bolivia para que "se pongan del lado del pueblo" y no repriman las protestas que denuncian fraude electoral, que le dio la victoria al partido de Evo Morales en primera vuelta.

La respuesta fue afirmativa y al unísono, al igual que el plazo que se le dio a Evo Morales. "Decirle al tirano que tiene 48 horas para renunciar", afirmaba un eufórico y casi sin voz Luis Fernando Camacho ante una multitud que lo aclamaba.

El presidente del Comité Pro Santa Cruz, que se ha convertido en uno de los rostros más visibles de las protestas que denuncian fraude y, además de la anulación de las elecciones, piden la renuncia del hombre que gobierna Bolivia desde 2006, invitó a la ciudadanía a una nueva cita el lunes, a las 19:00 de la noche, en el mismo lugar, el Cristo, pero con el reto de superar el millón de asistentes.

“No estamos derrocando a un Gobierno, estamos liberando a toda una nación. El lunes les prometo y garantizo que esa llama que iniciamos en el cabildo y que volvimos a encender en las elecciones, cuando declaramos paro indefinido, este lunes se vuelve a prender”, arengaba Camacho mientras la multitud gritaba: "Que se vaya, que se vaya, que se vaya".