Morales, que conoció temprano el lunes la infausta noticia, calificó de "irreparable pérdida" el deceso de Gueiler y sentenció que "la historia democrática boliviana siempre rendirá honor a su memoria".
En declaraciones a la radio estatal, el ministro de Comunicación, Iván Canelas, destacó el pedido del Gobierno para que los restos mortales de la ex presidenta, primera y única en la historia de 186 años de Bolivia, sean velados en la casona de gobierno, en la Plaza Murillo, tal como corresponde a su investidura.
La muerte de la ex gobernante por causas naturales, a tres meses de cumplir los 90 años, se registró hacia las 04.00 horas locales, de acuerdo con fuentes familiares.
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