27 marzo 2018

Theodor Friedrich “Bolivia es uno de los países que más avanzó en la lucha contra la pobreza”



Entrevista

Theodor Friedrich (Representante de la FAO en Bolivia)

El nuevo representante asumió el cargo el 1 de febrero de este año, en reemplazo de Crispim Moreira. Destacó los avances que tuvo el país en materia económica y seguridad alimentaria mediante la inclusión de los pequeños productores agrícolas, que antes estaban desconectados del desarrollo.

¿De dónde viene y con qué perspectivas asume el cargo en el Estado boliviano?
Llegué el 1 de febrero, era mi primer día de trabajo como representante oficial de la FAO en Bolivia, somos una organización al servicio de los países miembros, tenemos nuestro objetivo estratégico y general de erradicar el hambre en el mundo. Vengo a este país justamente con esta estrategia, conozco el Plan de Desarrollo Económico y Social (PDES 2016-2020) y la Agenda Patriótica (2025). Estos planes son congruentes con nuestros planes en Naciones Unidas, con la agenda a 2030.

¿En qué sectores enfocará su tarea en la gestión que inicia?
Creo que puedo asesorar al país, ayudar a avanzar en lo que ya han hecho. Bolivia es dentro de la región (Sudamérica) uno de los países que más avanzó en la lucha contra el hambre, contra la pobreza. Entonces vamos a seguir apoyando para que progrese hasta reducir el hambre a cero, pero también veremos los retos del cambio climático. Tenemos un marco de prioridades acordado con el país, y dentro de esto está la seguridad alimentaria, está el respaldo a la producción de la agricultura familiar sostenible, la atención a los recursos naturales como tierra, agua, suelo y bosque. Todos estos aspectos obviamente confluyen en la lucha contra el hambre y pobreza.

¿Qué aspectos puede destacar del país?, ¿qué referencias tiene?
La FAO cumple 40 años en Bolivia y la ha acompañado en todo este tiempo. El país partió de un momento en que era conocido como uno de los más pobres de la región, con una discrepancia muy grande entre pobreza y riqueza, con altos índices de hambre, pero en años pasados ha superado esta situación, ha avanzado más que otros países en la región. Alcanzó los objetivos del milenio de reducir a la mitad el hambre en la población, y estos aspectos son historias de éxito que se conocen en el exterior (...) Bolivia es un cierto modelo (en seguridad alimentaria), ha progresado en varias partes, como el sector indígena, por ejemplo, que antes estaba desconectado del desarrollo, era inexistente.

En Bolivia, el sector agrícola registró grandes avances, hay un sector industrial que usa moderna tecnología y otro que aún requiere más apoyo para su desarrollo, ¿qué opina al respecto?
Soy ingeniero agrícola, fui pequeño campesino de joven en Alemania, entiendo los asuntos de este sector. Como profesional, pienso que la FAO debe atender a los dos sectores. Es cierto que en las partes bajas de Bolivia hay una agricultura muy avanzada, muy tecnificada (...) este tipo de agricultura contribuye a la economía nacional, pero también tiene muchos retos ambientales, hablamos de transgénicos, del uso de plaguicidas (...) Entonces también debemos atenderla, de forma que mejore su comportamiento productivo y de sostenibilidad. Al mismo tiempo, de forma personal, me molesta la desconexión del pequeño campesino de las tecnologías, porque si no llevamos tecnología, y no necesariamente tractores grandes, sino maquinaria avanzada, los campesinos nunca van a salir de la pobreza ni van a entrar a una producción sostenible ni rentable. Por eso, es un reto completamente factible llevar tecnologías a los pequeños agricultores adaptadas a sus necesidades.

¿Cómo ve a la quinua después de que el Gobierno impulsó una campaña para promover el consumo de este alimento en el mundo?

El año de la quinua (declarado por la Organización de Naciones Unidas al 2013) ha sido un logro, un éxito grande porque a partir de ese momento, impulsado por Bolivia, logramos posicionar el grano en la conciencia mundial y vimos que la demanda, a partir de ese hecho, aumentó mucho en mercados ricos, como Estados Unidos y Europa. Es un alimento de moda, mucho más sano que los otros granos. En ese sentido, ese incremento también ha traído más producción y más importancia económica del cultivo (...) La quinua es un factor importante, el Centro Internacional de la Quinua que el país quiere establecer (en Oruro) creo que es un paso relevante en sentido de la sostenibilidad global de alimentos (...) porque en el mundo tenemos el problema de que cada vez producimos menos variedad de cultivos.

¿Cuál será su agenda?
Al inicio es conocer a las autoridades, a la gente, el país, sus realidades, pero como no tengo tanto tiempo quiero dejar por lo mentos una impronta (huella), mientras tanto estoy comenzando a trabajar.

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