Luego que la defensa del expresidente Gonzalo Sánchez de Lozada señalara a Evo Morales y Felipe Quispe como los responsables de la revuelta en 2003, ‘El Mallku’ aseguró que el líder cocalero “escapó” durante los sucesos de ese año y asumió que lideró las protestas, pero atribuyó a las Fuerzas Armadas como responsables de la represión y posterior caída del exmandatario.
“Evo Morales no estuvo en el país, estaba en Libia, luego en Venezuela, se ha escapado. Yo sí estuve, y no voy a negarme. Quieren hacerme un juicio, es fácil procesar a un indio, yo soy culpable, porque hice bloqueos, huelga de hambre, todo El Alto se levantó, los militares reprimieron y así cayó el Gobierno”, escribió en su cuenta de Facebook el exdirigente campesino.
La defensa del expresidente Sánchez de Lozada y de su exministro Carlos Sánchez Berzaín afirmó en la víspera que ellos no son responsables de la masacre en la guerra del gas, por el contrario señaló al actual presidente Evo Morales, en ese entonces dirigente cocalero, y al exdirigente campesino, Felipe Quispe, por haber organizado bloqueos y cercado La Paz.
El 5 de marzo, se inició el juicio civil que impulsan nueve familias de las víctimas de las revueltas de octubre de 2003 en contra del exjefe de Estado y de su principal ministro de Defensa, quienes comparecieron ante un tribunal estadounidense para responder por sus actos.
La demanda pretende que exista un resarcimiento económico a las familias después de más de 14 años desde los hechos sucedidos.
Después de la conformación del jurado, en la primera parte del juicio, los jurados vieron fotografías de ocho muertos y mapas donde los militares operaron en diferentes pueblos del país. En la segunda parte, se dio paso al testimonio de Etelvina Ramos, la madre de Marlene, la niña de ocho años que murió producto de una bala en el conflicto.
DEFENSA
A pesar de que el testimonio de Etelvina Ramos Mamani -madre de la niña Marlene que murió por un impacto de bala en octubre del 2003 en Warisata- causó gran impacto en la audiencia, la defensa de los acusados Gonzalo Sánchez de Lozada y Carlos Sánchez Berzaín está centrada en inculpar a Evo Morales, como principal responsable de aquellos hechos.
Ana Reyes, abogada del expresidente Sánchez de Lozada, aseguró que “no hubo un plan del gobierno de Sánchez de Lozada para matar a la gente” e inmediatamente levantó el apellido del presidente Morales, y apuntó a que él y otros líderes, como Felipe Quispe, fueron los responsables de los hechos sangrientos de septiembre y octubre de 2003, según reporta desde Washington Dc Guido Roberto Peredo para Urgentebo.com.
La abogada Reyes responsabilizó también a Morales y Quispe de los enfrentamientos entre la Guardia Presidencial de Sánchez de Lozada y las fuerzas policiales el 12 de febrero de ese año: aunque esos eventos fueron extemporáneos y tenían otras motivaciones. Cabe recordar que la Policía Boliviana se amotinó por el impuesto al salario y la reducción de presupuesto para la institución del orden.
Urgentebo.com se contactó con una representante del Centro de Derechos Constitucionales, que patrocina a las víctimas de octubre de 2003 y que prefirió mantener su nombre en reserva, manifestó que “lo que busca la defensa al involucrar, directamente o indirectamente en estos hechos, a gente en el gobierno de Bolivia es debilitar la causa e influir en el jurado. Por eso se ha pedido que el jurado sea compuesto por personas que tengan poco o ningún vínculo con la cultura o la política de América Latina”
Según la fuente, cuando un Juez ordena un “Gag de restricción” ambas partes deben cumplir la orden y bajo ningún medio se debe pasar información sobre los detalles del juicio a los medios de comunicación. “(Sin embargo), hemos evidenciado y se ha pasado la información al juez, con los links respectivos, de que la otra parte mantiene contacto directo con algunos medios escritos en Bolivia. Esperemos, ello sea sancionado. Es evidente, dijo sin embargo, de que hay (cuatro) periodistas acreditados y autorizados para realizar su trabajo”, añadió.
Alex Contreras, exministro de Comunicación y otrora hombre de confianza del presidente Evo Morales, aseguró “que las acusaciones de la defensa de Goni y Berzaín no tienen fundamento, pues Morales no estaba en el país en el momento de los enfrentamientos, pues estaba cumpliendo con una agenda en Europa. Seguramente, el señor Presidente podría probar ello, pues organicé y planifiqué sus viajes al viejo continente”.
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