Guido Mitma y Franklin Gutiérrez, dirigentes de sectores sociales que son contrarios al Movimiento al Socialismo (MAS), denunciaron que el Gobierno está presionando a los dirigentes para que eviten asistir a las movilizaciones del próximo 21 de febrero con la finalidad de desarticularlos, convocado por colectivos ciudadanos en rechazo a la repostulación de Evo Morales.
“Enviaron a sus empleados a amenazar a los miembros del comité ejecutivo de la COB con ser retirados de sus fuentes de trabajo si no asisten al congreso en Santa Cruz, eso con la finalidad de no permitir que participen de las movilizaciones del 21F”, aseguró el secretario ejecutivo de la Central Obrera Boliviana (COB), Guido Mitma.
De la misma manera, coincidió el dirigente de la Asociación Departamental de Productores de la hoja de coca de La Paz, Franklin Gutiérrez, en sentido de que el Gobierno está tratando de dividir esta organización con la creación de la confederación Única Nacional de Productores al Detalle de la Hoja de Coca (Conalprodc).
Mañana 21 de febrero se desarrollará una concentración en todas las ciudades capitales del país, en conmemoración del referéndum constitucional de 2016 donde se consultó a la población si estaba de acuerdo con la modificación del artículo 168 de la Constitución Política del Estado (CPE) que viabilizaba la repostulación de Evo Morales para las elecciones generales de 2019.
Colectivos ciudadanos, comités cívicos del país convocaron a un paro de 24 horas en rechazo al repostulación de Evo Morales, que fue habilitado por el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) a través de un fallo donde aplica preferentemente el artículo 23 de la Convención Americana de Derechos Humanos.
PARALELISMO
La Central Obrera Boliviana y la Asociación Departamental de Coca de La Paz participaron en las anteriores movilizaciones en respeto a los resultados del referéndum constitucional, donde ganó el “No” con el 51.34 por ciento.
En la COB surgió un problema interno por la dirección, los sectores ligados a Conalcam convocaron a un congreso ordinario que inició ayer en la ciudad de Santa Cruz, donde se elegirá al nuevo secretario ejecutivo del ente matriz.
Algunos sectores denunciaron que, Orlando Gutiérrez, sería el candidato puesto por el MAS, tomando en cuenta que este dirigente es parte de la Conalcam y se reúne constantemente con autoridades de estado.
En el caso de conflicto de Adepcoca, la nueva ley general de coca crea la confederación Única Nacional de Productores al Detalle de la Hoja de Coca, el cual aglutina a los productores que no están afiliados Adepcoca y no cultivan en el sector ancestral.
Este paralelismo de dirigencias se desarrolló desde el segundo mandato de Evo Morales (2010-2014), donde algunos miembros de los movimientos sociales no estaban de acuerdo con las políticas del MAS lo que originó que se distancien.
A esta conclusión llegan opositores, analistas y el exdefensor del Pueblo, Waldo Albarracín, quienes identificaron los casos concretos de los indígenas de la Amazonia de la Confederación Indígena del Oriente Boliviano (Cidob) que se desmarcaron del Gobierno; Consejo Nacional de Ayllus y Markas del Qullasuyu (Conamaq).
La última entidad que no había sido perforada por el oficialismo y recientemente en la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia (Apdhb), que había mostrado actitudes contrarias al Ejecutivo.
ACUARTELAMIENTO
Por otro lado, ante los anuncios de movilización de colectivos ciudadanos y sectores afines al MAS, el Comando General de la Policía instruyó el acuartelamiento de sus miembros para vigilar las marchas del 21F.
“El personal policial está acuartelado para poder resguardar y dar seguridad a lo que significa el normal desenvolvimiento de las actividades en relación al orden público”, señaló el general Faustino Mendoza.
Anticipó, además, que para ese efecto se desplegarán “policías con equipos antidisturbios en lugares claves para evitar el bloqueo de las carreteas y vías fundamentales que vertebran los diferentes departamentos”.
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