21 marzo 2017

Hay debilidad en plan comunicacional

Cuando el expresidente Carlos Mesa asumió como vocero de la demanda marítima se presentó una estrategia comunicacional por escrito, pero al final no fue difundida y quedó en el olvido. Hoy, el Gobierno asegura tener una estrategia, pero muy pocos la conocen, es más, en la Asamblea Legislativa señalan que nunca les presentaron esa documentación y los propios legisladores oficialistas la reclaman.

Está claro que hay una campaña comunicacional para reclamar una salida a las costas del Pacífico que en los últimos días se intensificó, pero no solamente por parte de las instituciones del Gobierno, sin ir más lejos, la Federación de Artistas en Recreación y Artes Escénicas de La Paz se sumó al pedido de Mar Para Bolivia e incluso realizaron una vigilia en la plaza San Francisco el 16 de marzo.

El Ministerio de Comunicación inició a comienzos del mes de marzo una campaña en las redes sociales con los hashtags #MarParaBolivia" y "#ElMarnosUne", que está acompañada de visitas a los establecimientos educativos y medios nacionales, según señaló a los medios estatales la ministra de Comunicación, Gisela López. El objetivo es lograr un “tuitazo” mundial, tanto hoy, día de la presentación de la réplica ante la Corte Internacional de Justicia, como el 23, día que se recuerda la pérdida de las costas del Pacífico.



Justifica ausencia

El presidente de la Cámara de Senadores, José Alberto Gonzales, justifica la falta de una estrategia comunicacional, asegura que luego que la Corte Internacional de justicia (CIJ) aceptó la demanda que presentó el Estado boliviano, nos encontramos en una etapa diferente. Se trata de acciones con un mayor acento “sobre lo jurídico, que sobre lo comunicacional”, aunque reconoce que en este tema el trabajo de Carlos Mesa “fue fundamental”.

El segundo vicepresidente de la Cámara de Diputados, Víctor Gutiérrez, reconoció que la estrategia no se presentó al Legislativo y que sería “interesante” conocerla. Se sorprendió cuando se le consultó si se había sumado a la campaña en las redes sociales y dijo que lo haría luego de la entrevista.



Redes Sociales

Sin embargo, se pudo observar que se intensificó la campaña con solicitudes e iniciativas para publicar en las redes sociales fotografías con un cartel y la consigna Mar para Bolivia. Aunque el diputado opositor Amilcar Barral sonríe al recordar que el cartel con el que se hizo sacar una fotografía se encontraba la imagen del presidente Evo Morales. Asegura que esto no es necesario, porque en vez de ayudar a mejorar la imagen del Primer Mandatario la deteriora, más si se difunden algunos textos como el titulado “Evito y el mar”, al tiempo de ratificar que desconoce la estrategia comunicacional que tiene el Gobierno.

Su colega, el diputado Gonzalo Barrientos ratifica que no hay una estrategia comunicacional, peor aún a nivel internacional. En su criterio, en el país no se conocen los detalles del desvío de las aguas del Silala, por ejemplo, y menos sobre el río Lauca, cuando se debería impulsar un proceso que ayude a explicar todos estos excesos: qué significa el Silala, dónde está, cómo se hicieron las obras artificiales, el uso indebido, la concesión, etc.

El exvicepresidente Víctor Hugo Cárdenas va más lejos, dice que hay una estrategia comunicacional, pero para mejorar la imagen del presidente Evo Morales y recuperar el prestigio que perdió ante la opinión pública.

Considera que las encuestas, incluidas las del Gobierno, muestran que la figura del Presidente y del MAS caen como en un tobogán, entonces, esa estrategia comunicacional intenta utilizar el tema del mar para mejorarla y “eso me parece una acción enormemente peligrosa”.

En su criterio, las redes sociales podrían ser un espacio para promover una estrategia nacional de unidad, respaldado por todos los sectores, pero más bien las usan para agredir contra quien piense distinto.



Falta coordinación

El expresidente Jorge Tuto Quiroga recuerda que fue Carlos Mesa quien diseñó una estrategia comunicacional, pero que en la actualidad parece haber ingresado en un “estado de hibernación”, que no ha sido eliminado, pero que no está activado.

Se puede observar que no hay una entidad que aglutine las distintas campañas que se intensificaron en los últimos días. Se desplegaron iniciativas para ser parte de la denominada “marea azul” y otras acciones particulares en unidades educativas, pero nadie las centraliza. Surgieron, por ejemplo, concursos, fotografías con estudiantes pidiendo mar para Bolivia y otros que seguramente crecerán estos días.





REDES SOCIALES

En los últimos días, se intensificó la campaña en favor de la demanda con solicitudes e iniciativas para publicar en las redes sociales fotografías con un cartel y la consigna "Mar para Bolivia".

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