31 mayo 2016

Discriminación debilita protesta de personas con discapacidad

Después de 31 días de vigilia de las personas con discapacidad en la ciudad de La Paz, la medida se hace insostenible y la demanda de un bono de 500 bolivianos/mes hace oídos sordos en el Gobierno.

Ayer, el sector movilizado se trasladó a la ciudad de El Alto para desarrollar la marcha por la vida y la dignidad, hecho que fue neutralizado por efectivos de la Policía que custodiaban la autopista La Paz–El Alto, vía que fue elegida por los discapacitados para descender a la hoyada.

Al respecto, el dirigente paceño, Jorge Flores, denunció el trato que están sufriendo en la ciudad sede del Gobierno que “primero no los dejan ingresar a la plaza Murillo y ahora les impiden utilizar el camino para trasladarse”.

“Estamos siendo menospreciados, somos víctimas de discriminación, porque nosotros como cualquier ciudadano tenemos el derecho de recorrer por todos los lugares que deseemos, pero no es así”, dijo.

Asimismo, explicó que la salud de sus compañeros se ve afectada por las bajas temperaturas, pero que pese a cualquier situación,los discapacitados continuarán con la lucha hasta conseguir su objetivo.

En Cochabamba

Personas con discapacidad en Cochabamba se movilizaron al igual que sus similares en La Paz, bloquearon por algunas horas la tranca del kilómetro 10 hacia Quillacollo, mientras la ministra de Salud, Ariana Campero, negó la posibilidad de dar la renta exigida por el sector.

Casi una veintena de personas con discapacidad con muletas y sillas de ruedas, al promediar el mediodía, llegó a la tranca de Quillacollo para bloquear esta vía en demanda de un bono de Bs 500. La medida duró tres horas, luego se replegaron de manera pacífica, debido a que efectivos policiales llegaron al sector. “Hemos tomado el peaje, estamos asumiendo la medida de presión exigiendo la atención a nuestras demandas por el Gobierno de una renta digna”, señaló el dirigente de la vigilia, Alberto Salazar.

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