,El secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y expresidente de Colombia (1994 - 1998), Ernesto Samper, durante su visita al departamento de Cochabamba ayer expresó que Bolivia destaca por su crecimiento económico en comparación a otros países de la región.
En la actualidad la región atraviesa por dificultades. Resalta una crisis política en los países de Bolivia y Venezuela. Gobiernos de izquierda, como Brasil y Bolivia, están inmersos en denuncias de corrupción. En Argentina hubo un giro en el gobierno con el ingreso del presidente Mauricio Macri.
En entrevista con este medio de comunicación, el Secretario General, realizó una evaluación sobre este escenario político.
P: En los últimos meses se ha visto con preocupación temas como la crisis económica y política en Venezuela, pasó lo mismo en Brasil, hubo un cambio de gobierno en Argentina, en Bolivia se registraron muertes en El Alto (La Paz). ¿Cuál es la percepción de la Unasur sobre la situación de los principales países miembros en lo político y económico?
R: La mala economía casi siempre genera mala política y es claro que el giro que se vivió en la región, por el cambio de las tendencias económicas favorables que llevábamos, ha incidido en que se alteren las condiciones de gobernabilidad. O sea, hoy día es más difícil gobernar que hace un año.
Sin embargo, yo pienso que la receta para salir de esta crisis económica no hay que buscarla afuera, no hay que esperar a que China compre más o que Europa se recupere, porque las posibilidades están aquí adentro. Tenemos que incrementar mucho más el comercio regional, invertir más en lo nuestro. Todo eso supone un cambio de mentalidad.
P: Y, específicamente, a Bolivia, ¿cómo ve?
R: Creo que Bolivia, en este panorama está un poco caótico, pero saca la cara por la región y tiene unos niveles de crecimiento muy por encima del promedio, una buena acumulación de reservas. Creo que Bolivia tiene una medalla especial dentro de este comportamiento regresivo que está viviendo la economías.
P: Unasur tiene un enfoque de izquierda, con el ingreso de Macri en Argentina, hay cierta disonancia. ¿Cómo se va a engranar los intereses regionales?
R: No diría que Unasur tenga una tendencia ideológica. Creo que en Unasur, que tiene unos compromisos fundacionales, estamos para defender la democracia, para buscar la paz y, claro, queremos que haya una vigencia de los derechos humanos, no solamente entendidos como derechos políticos, sino también como derechos sociales y económicos.
Y si se plantea entrar en esa perspectiva amplia, no creo que haya hoy en día ningún gobierno en la región que no esté de acuerdo en mantener el ritmo, proteger el ritmo que llevaba de inversión social en los últimos 15 años para preservar su propia legitimidad democrática.
No creo que haya ningún gobierno que no esté preocupado por evitar que toda la gente que consiguió sacar de la pobreza en los últimos 10 años, regresen a donde estaban. Es la mayor preocupación.
P:¿Qué opina sobre los cambios políticos en los países de Suramérica?
R: Son cambios normales mientras sean dentro de la democracia. O sea, la voz del pueblo es la voz de Dios y es el pueblo el que señala los giros y los cambios, los nuevos caminos que hay que tomar.
No hay que angustiarse. Es decir, en cualquier país, si la gente quiere hacer un giro, lo hace. Para eso se hizo la democracia.
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