El canciller del Estado, David Choquehuanca, manifestó que el Gobierno boliviano respalda la gestión del mandatario venezolano Nicolás Maduro y advierte que existen afanes de conspiración contra la democracia. En tanto, la oposición deplora que desde Bolivia se apoyen a regímenes violentos, pues en Venezuela ya se registraron tres muertos.
En conferencia de prensa, Choquehuanca se pronunció ante los recientes hechos registrados en Venezuela donde tres jóvenes perdieron la vida tras una semana de tensión y marchas estudiantiles.
“Queremos expresar nuestra solidaridad con el pueblo venezolano, nuestro total apoyo, a la democracia en Venezuela, nuestro total apoyo a su presidente Nicolás Maduro, elegido democráticamente, nuestro total apoyo a la revolución bolivariana en Venezuela”, dijo.
Para el canciller, estos hechos constituyen un intento de desestabilización al gobierno de Maduro, provocadas, según su criterio por la “arremetida de la derecha internacional”.
Por su parte, la diputada de Convergencia Nacional (CN), Alejandra Prado, calificó como censurable que el Gobierno de Evo Morales asuma defensa y partido por los regímenes que reaccionan con armas contra sus pueblos tal es el caso de Venezuela o Siria, a la que las autoridades nacionales apoyaron en 2013.
“Antes nuestro mandatario también expresó su solidaridad y respaldo al presidente sirio Bashar al-Assad cuyas fuerzas represivas causaron la muerte de más de 40 mil civiles, mientras que la guerra civil ya dejó un saldo de 130 mil muertos a diciembre de 2013. Además, un reporte fotográfico denuncia que en enero de este año se aplicó una sistemática tortura y muerte de ciudadanos sirios”, recordó Prado.
“Y hoy de nuevo, nuestras autoridades sacan cara por un régimen que viola los derechos humanos valiéndose de brazos armados civiles, llamados Tupamarus que sin dudar asesinan y torturan a sus propios ciudadanos. Son miles los estudiantes venezolanos que ejerciendo su derecho legítimo y constitucional a protesta marcharon contra la detención de varios jóvenes estudiantes, contra la crisis económica, la inseguridad ciudadana y escasez de alimentos y medicamentos que sufre la población venezolana”, agregó.
La situación en Venezuela se caracterizó además por la nula cobertura de los medios oficialistas. A ello, la “salida” planteada por los sectores movilizados fueron las redes sociales.
El columnista Eduardo Salazar escribió, en partes sobresalientes, su vivencia sobre los hechos:
“Quienes vivimos estos momentos, como en muchas otras oportunidades en los últimos 15 años, debimos correr al tiempo que pensábamos que esta faena era parte de vivir en un subcontinente marcado por las revoluciones, quizá producto de la inmadurez política; o de los malos gobernantes; de los opositores desesperados por el poder o ciudadanos con sed de andar tranquilamente, abastecerse de leche, pan, harina o papel higiénico; o algo tan fundamental para cualquier residente de un territorio que no está en guerra: sentirse seguro, sereno y en paz”, indicó.
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