Ante la iniciativa de unidad de la oposición en el Beni entre Samuel Doria Medina y el gobernador suspendido, Ernesto Suárez, para enfrentar al MAS, analistas aseguran que es un buen síntoma para las elecciones nacionales del 2014.
Los politólogos, Pablo Deheza y Carlos Cordero, coinciden que es necesario trabajar sobre una base programática despojándose de intereses personales para lograr resultados positivos.
Depende de la habilidad política. Deheza considera de que si bien todo acercamiento es positivo, sin embargo, depende también de la habilidad política de buscar un pacto de unidad fortalecido.
Sostuvo que lo que está pasando en el Beni entre Doria Medina y Suárez, se lo puede entender como un rumbo que se pretende apuntar para los comicios que es saludable para la democracia.
Remarcó que habrá que analizar la calidad de ese acuerdo como experimento, pero no hay que descuidar las estrategias de mantenerse en el poder el Movimiento Al Socialismo (MAS).
Puede haber segunda vuelta. El analista Carlos Cordero, indicó que lo que se puede gestar en Trinidad, es una muestra de que si se trabaja en un proyecto de oposición serio con coincidencias programáticas, es posible lograr una segunda vuelta el 2014.
Manifestó que es un inicio de la carrera electoral cuando la Cumbre Social de Cochabamba lo ratifica a Evo Morales como su candidato en busca de la tercera gestión presidencial.
Indicó que la alianza entre Suárez y Doria Medina, se sustenta en el éxito político en las elecciones municipales de Sucre.
El enemigo es la dispersión. Similar criterio de Cordero es del líder de UN, al sostener que la victoria opositora el 2011 en la capital del país, es un ejemplo de unidad y que es posible vencer al aparato que mueve el masismo.
“El enemigo principal no es el partido oficialista sino la dispersión pero encontramos un mecanismo a la boliviana de encontrar unidad y tuvimos un triunfo contundente en ese municipio contra el partido de gobierno que gastó 50 veces más pero perdió con más de 10 mil votos”, afirmó
El diputado masista, Antonio Molina aseveró que Doria Medina y Suárez no serían favorecidos.“La alianza no nos preocupa tampoco creemos que sea buena porque las condiciones en la que están ambos con acusaciones ante la justicia hace que estén desgastados, eso hace que para nosotros sea más fácil generar nuevos líderes políticos”, aseguró Molina.
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