Varios analistas y politólogos consultados por EL DIARIO, coincidieron que el contenido del discurso presidencial en Santa Cruz, pasó de un tono beligerante a uno de corte conciliador en el que incluso planteó la conclusión de la confrontación y ofreció unidad, igualdad y respeto a la propiedad privada.
Los líderes de opinión se mostraron sorprendidos por el cambio del tono discursivo del Jefe de Estado, no obstante, presentaron sus reparos porque una cosa es el discurso y los buenos deseos y otra diferente la realidad a la hora de gobernar con las regiones, sobre todo, con las de oposición al Gobierno.
Según la analista política, Jimena Costa, el mensaje presidencial de ayer en conmemoración al 185 aniversario de Bolivia, fue el “primer discurso racional”, estratégico y de contexto conciliador. Por su parte, el ex vocal de la CNE, Jorge Lazarte señaló que Morales dio un discurso de “un vencedor a un vencido”.
Costa indicó que como no ocurrió antes se escucho un “discurso racional, mesurado y bastante cuidadoso en sus referencias”, además de mostrarse con cierta actitud positiva hacia los cruceños.
“Se observó un mensaje más realista, más allá de las especificaciones, más equilibrada que en ocasiones anteriores, un discurso mejor pensado, a diferencia de oportunidades previas que parecería que tiene que ver más con la emotividad y memoria del Presidente”, señaló Costa.
Por otra parte, Jorge Lazarte sostuvo que el discurso presidencial tuvo un aire de “un vencedor a un vencido”, debido a que desde un tiempo a esta parte el Gobierno consiguió lo que quiso con las leyes aprobadas pese al desacuerdo de la oposición.
Asimismo, cuestionó a Morales por haber omitido voluntariamente los conflictos que atraviesa el país como la huelga general indefinida en Potosí. Calificó al mensaje como incompatible al momento de pedir unificación, tomando en cuenta el entrenamiento militar a civiles en distintos centros militares.
Francisco Zaratty, analista, sostuvo que el Jefe de Estado ya no puede tener en su pensamiento un país de ficción donde todo está bien, sin embargo, otra es la cruda realidad pues en estos seis meses muy poco se ha logrado para el país.
Para el politólogo, Marcelo Silva, el discurso del Presidente ha sido totalmente conciliador, lo que demuestra un cambio en su actitud beligerante que siempre ha sido la característica de sus discursos.
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