El presidente Evo Morales y el gobernador Rubén Costas sentaron ayer las bases para una reconciliación política después de una reunión que mantuvieron en el Palacio Quemado y programaron un nuevo encuentro para consolidar los mecanismos de coordinación entre ambos gobiernos.
Para el analista Carlos Cordero, ésta es una señal de esperanza con la que ambos líderes políticos reconocen la legitimidad que cada uno de ellos tiene.
El encuentro con Morales duró aproximadamente una hora y 15 minutos, y al finalizar la autoridad cruceña afirmó que “hemos hablado de temas generales que son importantes para la democracia, para la libertad y el estado de derecho. Puedo decir que la reunión se desarrolló en un ambiente de cordialidad (...) No hay que crear falsas expectativas, pero tampoco hay que matar estas posibilidades y esperanzas”.
Costas fue recibido en la plaza Murillo entre algunos abucheos de simpatizantes del Movimiento Al Socialismo (MAS) como el activista Édgar Mora y también los abrazos de algunos transeúntes.
El Gobernador cruceño aclaró que no dejará de ser opositor al Gobierno, pero trabajará en coordinación con éste en el marco del nuevo régimen autonómico que rige en el país.
Ambos líderes políticos se enfrascaron en una guerra verbal desde 2008; por ejemplo, Costas llamó a Morales “excelentísimo asesino”, mientras el Jefe de Estado tildó a aquél de “separatista”.
Costas fue uno de los principales opositores a la gestión de Morales y lideró el Consejo Nacional Democrático (Conalde), una organización que agrupó a las autoridades regionales opositoras al Gobierno del MAS.
El Gobernador cruceño manifestó su deseo de realizar reuniones más frecuentes, no sólo a nivel de gobernadores, sino a nivel técnico con las autoridades gubernamentales, e invitó al Mandatario a una cita en Santa Cruz cuando él vea conveniente para seguir construyendo “puentes de diálogo” entre el Gobierno central y los regionales.
En respuesta, el Presidente aceptó la invitación del Gobernador y dijo que irá a Santa Cruz para continuar con el proceso de diálogo y coordinación que se inició ayer. “Me sorprendió con la invitación, le agradezco (...) No solamente voy (a visitarlo) al Gobernador de Santa Cruz, sino (a las autoridades) en toda Bolivia”, dijo Morales en las afueras del Palacio. Para el Jefe de Estado, la reunión fue importante y amistosa. “Yo diría que inicia una forma de sentar confianza con el Gobernador y trabajar de manera conjunta con el departamento de Santa Cruz”.
Mientras este clima se vivía en el Palacio, el senador oficialista Isaac Ávalos criticó desde la Asamblea el encuentro, pues Costas habría venido a negociar su libertad o la anulación de los procesos penales que existen en su contra.
“Con ese flojonazo, ¿será que va a poder trabajar? Realmente no lo entiendo. Yo quiero ser sincero, el Presidente seguramente se va a reunir con él, estamos de acuerdo, pero no es para negociar su libertad ni para parar el proceso si él robó”.
Para el analista Cordero, la reunión entre Costas y Morales es una señal para salir del escenario de confrontación. “Así se podrían cerrar las brechas que se han abierto entre el oriente y el occidente; entre el Gobierno y las regiones”.
No obstante, consideró que se debe ser prudente en cuanto a los posibles resultados que podrían demandar más tiempo. “Se necesitan mutuamente, no pueden estar en un conflicto permanente. De pronto la paz social se impone y eso es principio para la gobernabilidad”.
El diputado del MSM y ex viceministro de Descentralización Fabián Yaksic también ponderó el encuentro entre ambos líderes políticos.
Cossío y Suárez esperan llamada
Tras la reunión entre el gobernador opositor de Santa Cruz, Rubén Costas, y el presidente Evo Morales, las autoridades departamentales de Tarija, Mario Cossío, y Beni, Ernesto Suárez, anunciaron, por separado, su disposición a asistir a un similar encuentro si el Jefe de Estado los convoca.
El Gobernador tarijeño afirmó que tiene toda la predisposición de viajar a la ciudad de La Paz “para crear puentes de confianza entre su Gobernación y el Ejecutivo central”.
Entre tanto, el representante beniano afirmó que cuando le llegue una invitación del Mandatario para una reunión, “estoy dispuesto a visitarlo o a asistir donde vea conveniente para dialogar”. En el Palacio aún no se conoce si hay invitaciones.
Opiniones
“(Hubo) una reunión muy importante con el gobernador Rubén Costas. Se inicia una nueva forma de sentar confianza para trabajar. Hay temas pendientes y esperamos de esta manera acordar con los opositores y oficialistas para crear confianza. Sólo en confianza se puede trabajar (...) Se crea confianza cuando hay honestidad, sinceridad”.
Evo Morales Ayma / Presidente del Estado
“Hemos venido para buscar la concordia, la concertación, no hemos venido a abrir ni cerrar nada (…) eso que quede claro. No se puede en una reunión solucionar todos los temas del país y tendremos que empezar a construir algo sostenible. Vamos a seguir siendo oposición, pero (esperamos) que podamos trabajar en conjunto”.
Rubén Costas Aguilera / Gobernador de Santa Cruz
Evo Morales Ayma
Presidente del Estado Plurinacional
Presidente electo del Estado Plurinacional de Bolivia, nació el 26 de octubre de 1959, en Isallavi, cantón Orinoca, muy cerca del lago Poopó de Oruro. Desciende de una familia aymara, nación indígena. A Morales Ayma le acusaron de “terrorista”, “guerrillero” y “narcotraficante”. A pesar de ello, en las elecciones del 18 de diciembre de 2005, rompió con todas las proyecciones políticas al vencer con el 53,7 por ciento de los votos y convertirse en el primer presidente indígena de Bolivia y América Latina. En las últimas elecciones de diciembre ganó con el 64 por ciento.
Rubén Costas Aguilera
Gobernador opositor de Santa Cruz
Es boliviano nacido en la ciudad de Santa Cruz de la Sierra, el 6 de octubre de 1955. Es agrónomo de profesión, y fue dirigente de la Confederación de Ganaderos de Bolivia, de la Asociación de Productores de Leche, de la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO) y del Comité pro Santa Cruz en 2003 y 2004. Costas es uno de los prefectos bolivianos opositores elegidos durante las elecciones generales de 2005. Fue líder de la denominada “media luna”, conjunto de departamentos del oriente boliviano que estaban a favor de la autonomía departamental.
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