La ceremonia religiosa de posesión de mando del reelecto presidente Evo Morales Aima, trajo consigo cosas buenas, malas y feas.
Entre las cosas buenas a destacar está la organización del evento, la movilización de efectivos policiales y militares, además, de la policía sindical para evitar cualquier contratiempo. El informe final otorgado tanto por el mallku Julian Véliz, del municipio de Tiwanaku, y del coronel Wilfredo Palacios, del Regimiento 3 de la ciudad de El Alto, detalla que antes, durante y después de la ceremonia no se presentaron conflictos.
Entre los hechos a destacar, figuran la distribución de más de 10 puntos médicos para la atención de gente con diferentes problemas de salud. La disposición de vigilantes para la protección de las ruinas del Complejo Arqueológico de Tiwanaku. La masiva visita de turistas, sobre todo argentinos y la colaboración de la población para ofrecer servicios como alojamiento y comida.
Lo malo del acto fue la falta de organización en cuanto a puntos de llegada y partida del servicio de autotransporte. Muchos turistas no sabían de dónde partían las movilidades de regreso a La Paz, lo que ocasionó algunas protestas.
La excesiva presencia de vendedores ambulantes que acapararon todas las vías de acceso a Tiwanaku. No hubo ningún control tanto de la Policía como del Municipio. Las personas que debieron caminar desde el complejo arqueológico hasta la Plaza central de Tiwanaku o a la inversa, en algunos casos, tuvieron que andar por el medio de la vía.
Entre los aspectos malos también está la falta de servicios higiénicos. Pocos dueños de viviendas se animaron a habilitar sus baños particulares para el público. En el complejo la distribución de los baños móviles también causó algunos problemas por el espacio reducido de los mismos, originando filas.
Los detalles feos de la actividad ceremonial en Tiwanaku involucraron la venta de bebidas alcohólicas, como cerveza y otros una vez concluido el acto central. Las personas “mareadas” o en algunos casos sanas, en especial varones, al no encontrar baños hacían sus necesidades fisiológicas en paredes o en espacios abiertos, sin que de por medio alguna autoridad sancione al responsable.
Otro punto feo resulta ser, casi como siempre, la acumulación de todo tipo de basura como botellas pett, bolsas de nylon o envolturas de papel, debido a la inexistencia de botes de basura. Los pocos que están instalados, tanto en la localidad como en el complejo arqueológico, fueron superados en su capacidad debido a la masiva presencia de ciudadanos bolivianos y extranjeros.
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