13 octubre 2009

Bolivianos en España forman largas colas para empadronarse


La Prensa

Valencia / Grupo Líder.- A escasos días del cierre del Padrón Electoral biométrico, los residentes bolivianos en España acuden masivamente a los centros de inscripción en muchos casos provocando una avalancha y poniendo en apuros al personal del Órgano Electoral Plurinacional designado en este país.

Una situación especial se vivió el domingo y ayer en Valencia, cuando centenares de compatriotas, aprovechando el fin de semana y el feriado por el Día de la Fiesta Nacional, llegaron desde distintas ciudades y pueblos próximos a la Comunidad Valenciana, formando largas colas a las puertas de los tres recintos habilitados, con la intención de empadronarse, que en muchos casos no lograron su objetivo porque ya no consiguieron una ficha para ese día.

“Desde el principio ha venido a empadronarse una buena cantidad de gente pero hoy hemos sido sorprendidos por la masiva presencia de compatriotas que ha venido desde otras ciudades cercanas a Valencia y estamos desbordados pero intentaremos empadronar a todos”, señaló Eliana Estrada, representante de la Corte Nacional Electoral de Bolivia en Valencia.

Ante la avalancha de centenares de inmigrantes bolivianos, el personal del Órgano Electoral tuvo que repartir fichas con día y hora para una mejor organización, aunque la gente que se trasladó de ciudades alejadas mostró su molestia porque no estaba en la posibilidad de quedarse hasta el día siguiente.

Los bolivianos residentes en Murcia, Albacete, Alicante, Hellín y Sevilla, entre otras ciudades que acogen a miles de compatriotas, expresaron su molestia ante las autoridades correspondientes que no instalaron otros centros de empadronamiento en esas ciudades. Doris Roda, Montereña residente en Hellín, protestó: ”Los que vivimos en otras ciudades alejadas de Madrid, Barcelona y Valencia también somos bolivianos y aportamos con nuestros envíos a la economía del país y por lo tanto creo que tenemos todo el derecho de participar en la elecciones”.

En muchos casos tuvieron que viajar más de 200 kilómetros y gastar más de 40 euros (unos 400 bolivianos) en pasajes de autobús o en combustible para sus vehículos y en alimentación para, de esa manera, cumplir con el deber ciudadano.

Desde el 14 de septiembre, siete notarios se encargan de empadronar en las seis máquinas asignadas a esta capital y que fueron repartidas en los tres recintos habilitados.

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