28 septiembre 2009

El MAS acusa a Joaquino de la violencia en Tinguipaya


El Movimiento Al Socialismo (MAS), a través del diputado potosino César Navarro, acusó a la militancia de la Alianza Social (AS) de agredir a su postulante a primer senador Eduardo Maldonado y de desatar violencia política en la región.

El candidato presidencial de AS, René Joaquino, rechazó la acusación y pidió a la Policía el esclarecimiento del hecho.

Además convocó a los líderes de partidos políticos a un “pacto de no agresión”, llevar adelante elecciones limpias y permitir a todos desplegar sus campañas en cualquier punto del territorio nacional.

Maldonado, ex defensor del Pueblo en Potosí, y otros cuatro militantes del MAS fueron atacados el sábado en la localidad de Tinguipaya por medio centenar de campesinos cuando se aprestaban a participar en un cabildo.

El hecho ocurrió entre las 14.30 y 15.00, cuando en el lugar aparecieron comunarios aparentemente de la organización Pueblo Indígena, de Armando Iporre, candidato a primer senador de AS por Potosí.

Navarro, en declaraciones a la red Patria Nueva, denunció que “cuando Maldonado estaba con un grupo de compañeros que forman parte de la estructura de apoyo a la campaña electoral del MAS, fue agredido por un grupo de campesinos que descendieron de un cerro y atacaron sin hacer ninguna consulta”.

“Cuando llegaron al lugar, lo hicieron reventando cachorros de dinamita, agredieron y gritaron contra la presencia de masistas en la localidad. Lo que demuestra que fue una actitud de violencia política y social debidamente planificada”.

En agosto de este año, el dirigente originario Julián Mamani falleció como consecuencia de un enfrentamiento entre indígenas y masistas por la autonomía en la misma zona.

Navarro relató que alrededor de 60 personas sacaron a tirones a Maldonado del automóvil en el que se encontraba y lo golpearon con saña, pues le infligieron severas heridas en el rostro y lesiones en el cuerpo.

El diputado masista anunció que en las próximas horas se presentará una denuncia ante el Ministerio Público para que inicie una investigación del suceso e identifique a los agresores para procesarlos en la justicia.

Joaquino señaló que nadie puede lanzar acusaciones sin fundamento y sin contar con información oficial, por lo que pidió a la Policía el esclarecimiento del hecho, porque no puede quedar impune.

Sin embargo, señaló que las versiones extraoficiales que se conocen dan cuenta de que se trata de un conflicto interno de los militantes del partido oficialista.

Recordó que la conducta agresiva del Gobierno ha sido copiada por sus militantes, algunos de los cuales agredieron la semana pasada en Cochabamba al candidato vicepresidencial de AS, Carlos Suárez, y se oponen a que se haga campaña de manera democrática.

Según Joaquino, su persona siempre respetó la trayectoria de Maldonado como Defensor del Pueblo y nunca tuvo problemas.

La Federación de Juntas Vecinales (Fejuve) de El Alto y la Central Obrera Regional (COR), afines a la candidatura de Evo Morales, vetaron a los postulantes de la oposición para que hagan campaña en esa ciudad.

Cardenal pide hermandad

El cardenal y presidente de la Conferencia Episcopal de Bolivia (CEB), Julio Terrazas, exhortó ayer a quienes están en campaña electoral y al pueblo a difundir la palabra de Dios.

Esto ayudará, dijo, a que quienes están en competencia electoral “busquen la verdad, la vida, el amor, la hermandad entre todos”.

En días pasados, los pastores episcopales emitieron el mensaje “Por una campaña electoral democrática y pacífica”, en el que los obispos piden a los candidatos y sus seguidores “crear un clima de serenidad y tolerancia”.

Demandan que las campañas proselitistas sean “respetuosas” y serenas, “desterrando de una vez por todas los insultos, la violencia y las manifestaciones de tinte racista”.

Terrazas agregó que la diversidad cultural no es enemiga de la confraternidad, por lo que la convivencia entre diversos “es posible”, e instó a los bolivianos a descubrir el proyecto de vida para elegir a las autoridades durante las próximas elecciones generales.

“Somos culturalmente diversos, pero eso no quiere decir que tenemos que ser necesariamente enemigos”.

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